Bobby Paunetto, la ciudad de Nueva York y la síntesis de la música

Por Chico Álvarez Peraza
10 de agosto de 2020

Versión libre al español Israel Sánchez-Coll
Tomado de LatinJazzNet

Bobby Paunetto fue un compositor, arreglista, músico y artista discográfico inolvidable. Latin Jazz Network le realiza un homenaje en el décimo aniversario de su fallecimiento (8-10-2010).

Su verdadero nombre era Robert Vincent Paunetto, pero la mayoría de la gente lo conocía simplemente como Bobby. Nació en la ciudad de Nueva York el día 22 de junio de 1944. En su adolescencia recibió su formación musical en la misma ciudad y luego continuó sus estudios en el prestigioso Berklee College of Music de Boston (1969-1973), donde se especializó en Composición Musical.

Sus primeros años

Aquellos que conocieron a Bobby en sus años de formación están de acuerdo en que estaba destinado a convertirse en un exitoso compositor, arreglista y músico. Por supuesto, logró hacer todo lo anterior, emergiendo en 1968 como artista discográfico, y lanzando su primer álbum El Sonido Moderno, con el sello Mardi Gras Records, una subsidiaria del sello Roulette, propiedad del legendario magnate discográfico Morris Levy. Parecería según los estándares del "mundo del espectáculo" de la época, que este lanzamiento no fuera un gran contrato; sin embargo, fue su primer paso en una ilustre carrera en la música, ¡y qué gran primer paso dio! En efecto, Mardi Gras fue el primer sello en el cual grabó Joe Cuba y su Sexteo, pero Levy había perdido este sexteto al ellos firmar con otra casa musical. El formato de un grupo pequeño, con el vibráfono como instrumento principal, estaba muy de moda en esos años y el Sr. Levy necesitaba un grupo que compensara la pérdida de un sexteto tan estelar. El Sonido Moderno no fue tan exitoso en términos de ventas, pero en términos de arte fue una verdadera joya, ya que reunió algunas de las estrellas sobresalientes en el Nueva York de ese momento.

Los músicos para la grabación de este álbum fueron los siguientes: el pianista John Marrero; el saxofonista alto Art Ferrero; los bajistas Fernando Oquendo y Henry Zapata (este último solo intervino en el tema “Mambo Sevilla”); el cantante principal Tony Centeno; en la tumbadora (batería de conga), Tommy López; John “Dandy” Rodríguez en la percusión; en los timbaleros Ray Cruz y Ray Miranda (este último solo intervino en “Mambo Sevilla”) y el baterista Jimmy Centeno. Juntos, estos muchachos prepararon una mezcla única (para su época) de pop estadounidense, música bailable cubana y jazz.

El Sonido Moderno

1967 - El Sonido Moderno - The Modern Sound of Bobby Pauneto - caratula frontal

1967 - El Sonido Moderno - The Modern Sound of Bobby Pauneto - caratula trasera

1967 - El Sonido Moderno - The Modern Sound of Bobby Pauneto

Fecha: enero de 1968 (Mardi Gras 5030)

Producida por Pancho Cristal (nombre real Francisco Morris Pelsman)

Temas: 1. Aguantando; 2. Mi Flor Tropical; 3. Is It Tasty?; 4. Alfie; 5. Why Is Woody Sad?; 6. Mambo Sevilla; 7. El Señor Sid; 8. Dig It Like This; 9. Chinatown; 10. Pero Dime Tú.

Personal: Bobby Paunetto: vibrafono y marimba; John Marrero: piano; Art Ferrero: saxofón alto; Fernando Oquendo: bajo; Tony Centeno: cantante principal, pandereta; Ray Cruz: timbales; Ray Miranda: timbales en “Mambo Sevilla”; Tommy López: tumbadoras; Jimmy Centeno: batería; John “Dandy” Rodríguez: bongós, cencerro y tumbadora; Henry Zapata: bajo en “Mambo Sevilla.

Con el transcurso del tiempo, este álbum se disolvería en la oscuridad y permanecería en gran parte olvidado (la etiqueta subsidiaria también se desactivó) y, posteriormente, el álbum se convirtió en un objeto de colección y culto.

Después de todo, era un álbum principalmente bailable y las tendencias del baile cambiaban constantemente con el paso del tiempo. Antes de esta grabación, en 1965, Bobby también había grabado algunas pistas para el sello Seeco, propiedad de Sidney Siegel (quien por algunas razones también perdería al Sexteto de Joe Cuba, ellos regresarían con el Sr. Levy).

Las sesiones de 1965 estaban más o menos en la misma línea que las grabaciones de Bobby con el sello Mardi Gras. Dos de estas selecciones, “Algo para O.M.” y “Mambo Sevilla” se hicieron originalmente como un demo en 1963. Al año siguiente grabó “Aguantando” en formato instrumental, y nuevamente como un demo, pero nunca fue comercializado (no obstante, lo volvería a grabar para el álbum de Mardi Gras, esta vez con voces). Sus esfuerzos no fueron nada en vano y pronto llamaron la atención al ejecutivo discográfico Howard Roseff, nacido en el Bronx, quien convenció a su primo Sidney Siegel para que incluyera a Bobby Paunetto, de veintiún años, en su lista de artistas. Los discos de Seeco albergaban un enorme catálogo de música de toda Latinoamérica, pero particularmente de música cubana.

Los discos de 45 rpm de Seeco nunca tuvieron algún tipo de impacto en la escena musical o bailable, ni se vendieron, obviamente, ya que nunca hubo un álbum de seguimiento. Fueron grabados en directo, como la mayoría de las grabaciones de entonces, y no fueron más que un preludio de la gran obra que produciría Paunetto en la década siguiente. Bobby se mantuvo en contacto con el Sr. Roseff, quien murió en el año de 2012, solo dos años después del fallecimiento de Bobby.

Frecuentemente, las primeras grabaciones de Bobby Paunetto —al igual que con muchos de los héroes olvidados de la época— eran una mezcla alegre de mambo, son montuno y guajira, interpretadas majestuosamente por un joven que solo había estado tocando su instrumento por tan solo tres años. Incluso en esta temprana etapa de su carrera, pudo seleccionar la crema innata para su limitado proyecto; para los tumbaos de bajo convocó nada menos que al ex acompañante de Machito, Bobby Rodríguez; en los timbales se presentó el percusionista Johnny “Dandy” Rodríguez; Frankie Malabé fue el bongosero (tocó el bongo) y Jimmy Centeno estuvo en la tumbadora, firme como una roca (conga). Para el piano eligió a Sonny Bravo, una persona relativamente nueva en la escena, pero que más tarde alcanzaría el estrellato por derecho propio. Para sus cantantes eligió a algunos de los veteranos más avezados de la época: Willie Torres (cantante del sexteto de Joe Cuba), Santos Colón (de la orquesta de Tito Puente) y Chivirico Dávila (de la orquesta de Pérez Prado y artista discográfico de la Alegre All Stars).

Las sesiones de Seeco 45 RPM

1965 - No-Van-Co - Mambo - Bobby Paunetto con su Orquesta

1965 - No-Van-Co - Mambo - Bobby Paunetto con su Orquesta

Fecha: 1965 (Seeco Records)

Arreglos de Bobby Paunetto

Temas: 1. Olvidado; 2. Aquí Voy Yo; 3. No Van Co; 4. Miércoles Paso; 5. De Mi Amor; 6. Guajira Dulce.

Personal: Bobby Paunetto: vibráfono; Bobby Rodríguez: bajo; John “Dandy” Rodríguez: timbales; Frankie Malabé: bongoes, percusión; Jimmy Centeno: tumbadora; Sonny Bravo: piano; Willie Torres: voz principal; Santos Colón: coros; Chivirico Dávila: coros.

Recientemente, todas las primeras grabaciones de Bobby han sido reunidas y reeditadas en formato CD (¿qué más?) bajo el nombre original de El Sonido Moderno. La mayoría de los géneros cubanos populares están representados aquí, con un toque de R&B y Soul de la ciudad de Nueva York.

“Aguantando”, “¿Por qué está triste Woody?”, “Mambo Sevilla”, “El Señor Sid” y “Dig It Like This” son composiciones de Paunetto. “Mi Flor Tropical”, “Is It Tasty?”, “Chinatown” y “Pero Dime Tú” son en colaboración y coautoría con algunos de sus acompañantes. Es digno de especial mención la pieza original de Hal David y Burt Bacharach “Alfie”, un bolero instrumental que presenta a Bobby tocando la melodía y también improvisando. “Alfie” fue el tema de amor de una película muy popular que se estrenó en 1966. Se articula maravillosamente aquí, y su toque melódico del vibráfono recuerda tanto a Cal Tjader como a Milt Jackson.

“Bobby Paunetto era una persona tan única como cualquier otra persona con la que haya tenido el placer de actuar. La frase que a menudo se usa en exceso, "adelantado a su tiempo", ciertamente converge en él. ¡El contenido melódico y armónico de sus composiciones además de sus arreglos isiempre parecían ocasionarme una sonrisa! Por supuesto, el mismo Bobby tenía también esa sonrisa en su rostro cuando tocaba su propia música; la sonrisa que irónicamente le dijo al resto de sus colegas, "¡De eso estoy hablando!" “Bobby Paunetto: Un verdadero erudito y un gran caballero.”

– Sonny Bravo, pianista, arreglista y director de orquesta.

Bobby también aparece (en otro momento) en la marimba moderna, una versión ampliada del instrumento amerindio cromático tradicional que lleva el mismo nombre. Todos los arreglos fueron escritos por Bobby y el único que no era músico, y estaba involucrado en el proyecto lo fue Pancho Cristal, quien esta reseñado como A&R* man. Bobby Paunetto fue un formidable instrumentista, excelente en el vibráfono, admirado y respetado por dos de los íconos de ese instrumento: Cal Tjader y Louie Ramírez.

*A&R significa "Artistas y repertorio" y es el título que se le da a la persona en una compañía discográfica o editorial musical que es responsable de buscar talentos y supervisar el desarrollo artístico de los artistas discográficos y/o compositores. Algunas personas de A&R eran en realidad músicos, pero en su mayoría eran muy cercanos al propietario y les encantaba estar rodeados de músicos. Este fue el caso del señor Cristal, cuyo verdadero nombre era Francisco Morris Pelsman.

“He visto actuar a Bob Paunetto y he escuchado su música con creciente admiración. Durante los últimos cinco años tanto su talento como su repertorio han florecido hasta convertirse en lo que es hoy. Es con mucha alegría que escribo algunas notas sobre este joven vibrafonista, ahora de vuelta en escena después de haber terminado su servicio en las Fuerzas Armadas de los Estados Unidos. Antes de servir en el servicio activo, Bobby grabó algunos temas para el sello Seeco. No obstante, había estado ausente de la escena durante un tiempo considerable y por lo tanto su nombre no era muy conocido. Antes de su inducción, y de vez en cuando, animaba a Bobby a que se sentara con mi banda en los vibráfonos y nos gratificaba con su presencia. Al final, yo fui el afortunado, ya que posteriormente me invitó a ser parte de su última sesión de grabación. Por supuesto, me complació ver y escuchar cómo había crecido musicalmente, desarrollando un sonido único, y una base adecuada para el mercado actual latinoamericano. Así que ahora, les pido que no solo escuchen, sino que también bailen con la música llena de emociones de Bobby Paunetto y su banda".

– Tito Puente, quien también tocó el vibráfono y escribió las notas para el álbum Mardi Gras de Bobby

por los alrededores del Bronx cerca de 1960, teatro Puerto Rico

Por los alrededores del Bronx cerca de 1960 - Teatro de Puerto Rico.

El disco antes mencionado, El Sonido Moderno de Bobby Paunetto ―grabado en 1968― estaba repleto de maravillosas melodías cortas y bailables que habrían complacido a los amantes del mambo, desde La Habana hasta Monterrey, culminando con "Pero Dime Tú", un trepidante montuno-descarga que se extiende por seis minutos y medio. Perfectamente adecuado para los más exigentes asistentes del Palladium, así como para los nuevos neófitos de la salsa; contó además con el excelente trabajo de percusión de Tomás López, el animado trabajo de un solo de piano de John Marrero y una armoniosa pincelada de vibráfono del Sr. Paunetto. El veterano mambero Johnny Rodríguez estuvo presente para tocar los bongós y el cencerro. La letra estuvo a cargo del baterista y vocalista Tony Centeno, y aludía al cierre del famoso Palladium Ballroom (el cual ocurrió dos años antes, el 2 de mayo de 1966); “pero dime tú, que es lo que pasó, yo quiero saber, por qué se acabó”. Es explosivo en su elemento y color afrocubano, además de ser una forma muy divertida de terminar un álbum bailable. La sección rítmica estuvo muy bien completada por Fernando Oquendo en el bajo y Ray Cruz en los timbales.

También está presente en esta grabación Art Ferrero en el saxo alto. Ferrero fue lo que podríamos llamar el caballo oscuro, destacándose para la ocasión, tal como Paunetto esperaba que lo hiciera. El bajista Henry Zapata emergió en el maravilloso “Mambo Sevilla”, al igual que Ray Miranda en los timbales. Prácticamente todo el material lo compuso Bobby, a excepción de “Alfie”, y hubo algunos temas en los que colaboró Marrero y Centeno. Tanto las sesiones de Seeco como las de Mardi Gras fueron reeditadas en formato CD en 1999, con notas de Miles Perlich.

El Hombre

Bobby Vince Paunetto nació en Nueva York el 22 de junio de 1944, en el seno de una familia de italianos y españoles catalanes que finalmente establecieron su hogar en una sección de clase media del Bronx. Desde niños, Bobby y sus dos hermanos mayores solían escuchar a su madre cantar tangos y verla bailar el lindy hop. Ya a la edad de cinco años, su madre lo llevó a una audición (ella era una aspirante a bailarina) en el famoso Teatro Roxy (demolido en 1960), donde presenció por primera vez el juego elegante de los pases bailables de Fred Astaire, obteniendo sin duda una premisa. Echar un vistazo al mundo del espectáculo estadounidense, fue evidentemente este el momento cuando el joven empezó a adquirir el gusto por la música. Con el trascurrir de los años, ella también fue de gran ayuda, escribiendo las letras en español para sus primeras grabaciones. Pero el inglés era el principal idioma que se hablaba en casa, y debido a que la radio estadounidense significaba todo para la generación de la posguerra, expuso a Bobby a casi todos los tipos de música posibles.

El DJ Douglas

El DJ Douglas "Jocko" Henderson (March 8, 1918 – July 15, 2000)

Muy pronto el joven Bobby conoció el jazz, cuando escuchó el programa de radio del popular DJ "Jocko" Henderson en WOW (emisora que luego paso a llamarse WALDO en 1959). Lo más probable es que fue en uno de estos programas donde escuchó por primera vez a Charlie Parker, un evento que cambió su vida para siempre. Para él, Parker había conquistado la velocidad de la luz y sería para siempre su saxofón alto favorito. En el otro extremo del espectro musical estaban esos animados ritmos de baile cubanos, que de alguna manera se habían abierto camino en la vida de Charlie Parker y de tantas otras estrellas del jazz bebop. Era –como me decía a menudo el pianista René Leyva– fusión sin confusión. Fue el hermano mayor de Bobby, de nombre Raymond, quien finalmente lo ayudaría a hacer la conexión. Raymond iba a bailar al Palladium y lo que aprendiera viendo, captando y escuchando las grandes bandas del momento, lo compartiría con su hermano menor, Bobby. Pero como el destino a la larga se lo proporcionaría, ni Bird ni el Palladium lo llevarían a una carrera en la música. Más bien sería su destreza atlética.

El momento adecuado en el lugar adecuado

Bobby Paunetto era un atleta nato. De hecho, este joven era tan atlético que en 1959 fue premiado y reconocido como uno de los mejores atletas jóvenes en el sistema de las Escuelas Públicas de la ciudad de Nueva York. Al poco tiempo, él y algunos de sus compañeros de equipo de baloncesto fueron invitados por la Liga Atlética de la Policía a un concierto en el Yorkville Casino en el alto Manhattan. Era el año de 1961 y el artista de jazz que actuaba en ese evento no era más que Cal Tjader. Uno de los amigos de Bobby, el saxofonista Pat Patrick, le presentó a Cal y los dos de inmediato simpatizaron. Al final de la velada, Cal le ofreció a Bobby su teléfono y dirección en California. No se sabe mucho acerca de su conversación, pero obviamente Bobby había convergido en algunos puntos con Cal, porque al año siguiente el Sr. Tjader lanzó su primer álbum de Verve In A Latin Bag (1962). Fue para Cal, la culminación de muchos años de fusionar dos idiomas distintos, el jazz y la música cubana. Incluso hoy, muchas personas que están "al tanto" han aclamado ese álbum como el mayor logro de Cal. En ese álbum se incluía una pieza que él (Tjader) había compuesto en honor a Bobby Paunetto. Esa melodía era “Paunetto’s Point”.

Los años de práctica

El apacible Cal Tjader había encendido la llama y Paunetto debía llevar la antorcha. Tjader no solo inspiró a Bobby a tocar el instrumento, sino que fue Cal, junto con el percusionista Johnny Rae, quienes también le proporcionaron su primer conjunto con vibráfono. Ese mismo año Bobby compró su primer piano y comenzó a componer su propio material. Los deportes ya habían pasado a un segundo plano frente a su nueva pasión y se sumergió en todos los aspectos en la música. Estudió con ardor teoría, composición, orquestación, armonía, y practicaba su instrumento hasta siete horas al día. Le tomaría poco más de un año convertirse en un profesional, y por voluntad del destino, una vez más, su amigo Cal Tjader logró en 1963 que se iniciara en el Embassy Ballroom de la ciudad de Nueva York. Ahora Bobby Paunetto estaba actuando en el paraíso del mambo.

Los tiempos están cambiando

Era agosto de 1965 y una vez más el destino intervendría; Bobby Paunetto fue reclutado por las fuerzas armadas de los EE.UU y sirvió honorablemente hasta 1967. A su regreso a la vida civil —y a su amada Nueva York— Paunetto buscó a algunos de sus antiguos compañeros y pronto estuvo dando conciertos en la ciudad y sus alrededores. Extrañamente, no pudo evitar notar que el viejo sonido cubano del mambo y cha cha chá habían sido reemplazados por una nueva tonada y forma de baile híbrida conocida como “latin boogaloo” o boogaloo latino. No entraré en el quién, el qué, el dónde y el por qué, pero baste decir que en 1967 había bandas de boogaloo por todos los distritos o barrios de la gran ciudad. Los directores de orquestas más veteranos y establecidos no estaban nada satisfechos con esta nueva forma, sin embargo, comenzaron a incluir los boogaloos en su repertorio general. Colectivamente, sabían que, como género, acabaría desapareciendo, así que lo aceptaron con indiferencia.

Así que ¡hagámoslo!

1967 - I Like It Like That - Pete Rodriguez

1967 - I Like It Like That - Pete Rodriguez

1967 fue el año en que el pianista Pete Rodríguez lanzó "I Like It Like That". Fue un éxito instantáneo y marcó el estándar para el resto de la década. Bobby Paunetto, que no deseaba quedarse por fuera de esta nueva y lucrativa locura pop, decidió incorporar la mezcla soul-montuno a su propio formato, pero en lugar de limitarse a repetir los viejos cambios de acordes y melodías vocales, profundizó en el lenguaje del jazz, como ya había hecho el propio Cal Tjader con su exitoso crossover “Soul Sauce”. Artistas de gran éxito como Pete Rodríguez, Johnny Colón y The Lebron Brothers, entre otros, habían puesto especial énfasis en las voces crudas y desinhibidas, y en un duro ritmo de fondo (influenciado sin duda por ese sonido alegre del soul-stirrin'-gospel), reforzado por supuesto por un ambiente de fiesta. La clave no se perdió del todo, pero sí pasó a un segundo plano, y todos esos elegantes pasos al estilo del Palladium ya no eran "la cosa". La nueva audiencia era una multitud feliz que se dejaba llevar, y la música híbrida reflejaba ese público. Fue un precursor de lo que vendría después. Era rock latino en ciernes, sin el elemento cool del jazz.

En segundo lugar, la falta de promoción que (no) se le dio al álbum fue un factor determinante en la falta de ventas. La radio en español ya no era dominio de Alegre, Panart, Seeco, Tico, RCA, Decca, United Artists y Columbia Records. Las ondas de la radio en Nueva York ahora estaban siendo controladas por Cotique y Fania. Los locutores ahora hablaban en inglés y aparecían nuevos sellos a diestra y siniestra. El Sonido Moderno era considerado buena música por la mayoría de los músicos, pero los bailarines no lo compraban, porque estaban involucrados por una locura de baile que estaba arrasando en las listas de éxitos. En los tres años siguientes se producirían algunos cambios sutiles, pero lo cierto es que el jazz latino había empezado a decaer, pero no por mucho tiempo.

Boogaloo latino: R.I.P.

De hecho, fue una moda, una fase juvenil y moderna que empezó a decaer alrededor de 1969. Las formas tradicionales de baile latinoamericano prevalecieron y las bandas de boogaloo comenzaron a regresar a las raíces. La combinación clásica de son montuno y guaguancó de Arsenio ahora se tocaba nuevamente, gracias a la Orquesta Harlow, a Charlie Palmieri y a Johnny Pacheco. Las grandes bandas de Tito Rodríguez, Machito y Tito Puente siguieron tocando los viejos mambos y cha cha chá, y a pesar de la gran comunidad puertorriqueña, la bomba, la plena y otros géneros de esa isla aún no estaban en el horizonte, al menos todavía no. En un crisol tan grande como la ciudad de Nueva York, estas y otras formas rústicas acabarían fundiéndose para formar un sonido nuevo y único. Los frutos de lo que Fernando Ortiz denominó transculturación comenzarían a florecer en las décadas siguientes, pero no al azar. Bobby Paunetto, cuyo origen procedían de varios grupos de inmigrantes, estaba tomando notas.

Pero espere que hay más

La guerra civil dominicana que comenzó en 1965 inició un ciclo de migración de ese país hacia los Estados Unidos y, en particular, hacia la ciudad de Nueva York. A medida que la comunidad dominicana se disparaba durante los años 70, el baile nacional de la isla, el merengue, comenzó a generar un aumento en la popularidad dentro de la comunidad hispana en general.

Con la aprobación de varias enmiendas a las leyes de inmigración de los Estados Unidos en 1965, también se produjo una gran segunda oleada de inmigración colombiana a la ciudad de Nueva York, añadiendo este grupo particular al crisol de latinoamericanos que ya estaban aquí. Cada ola subsiguiente de inmigrantes hispanos agregaría invariablemente sus elementos folclóricos únicos al paisaje sonoro de la ciudad. De hecho, la Gran Manzana estaba cambiando, con bastante rapidez, y los gustos musicales comenzaban a cambiar con ella. Justo en medio de todo este conglomerado musical estaba el bebop jazz de Charlie Parker y Dizzy Gillespie, y los ritmos afrocubanos de Chano Pozo y Machito. Bobby Paunetto, aún estaba tomando notas, debió haberse preguntado en algún momento y en voz alta: ¿se tragará esta amalgama el jazz que tanto amamos? ¿Comenzarán los sellos discográficos a atender exclusivamente a estas nuevas formas híbridas, socavando las ricas tradiciones de jazz de Gone City?*

*En el libro BLACK SLANG: A Dictionary of Afro-American Talk (Editado por Clarence Major, 1971) La palabra GONE (1940's-50's) significa cualquier cosa inusualmente emocionante y buena, a veces hasta el punto de ser irreal; en trance; loca.

Sin desanimarse, comenzó a buscar alternativas. Logró conseguir varias cartas de recomendación de íconos del jazz latino como Ramón “Mongo” Santamaría, Tito Puente y el mismo Cal Tjader, además de la invaluable ayuda financiera de los EE. UU., por parte de la Administración de Veteranos, por lo que Bobby Paunetto ingresó al prestigioso Berklee College of Music, donde sería instruido por el vibrafonista Gary Burton, entre otros profesores de música. Los siguientes años en el Berklee fortalecerían su base musical, ampliando no sólo sus habilidades musicales, sino también su sensibilidad a la trinidad probada por el tiempo de melodía-armonía-ritmo, añadiendo más textura y profundidad a sus composiciones. La síntesis de intelecto y emoción desplegada en su obra sería recordada durante mucho tiempo por todos los que participaron en ella, pero también sería olvidada dentro del mundo de la música comercial. Tal es el legado de un genio.

"Bobby Paunetto fue verdaderamente grande, un músico bien estudiado con grandes sueños. Le encantaba la música de Cal Tjader y modeló un sexteto según el suyo (Tjader), añadiendo más tarde un saxofón para convertirlo en un septeto. Tuve el privilegio de trabajar con él cuando ambos vivíamos en el Bronx e incluso grabé con él algunas veces. Nos hicimos muy buenos amigos y a menudo compartíamos en la banda de Tito Puente como percusionistas. Él es, de hecho, quien está en la batería de congas en la versión de Tito Puente de "María Cervantes", donde yo toqué los timbales, Juan "Papi" Cadavieco pasó a los bongós y Tito se encargó del vibráfono. Bobby era un arreglista y compositor muy talentoso que se enfocaba más en la estética de la música que en el aspecto comercial o empresarial. Sus compañeros siempre lo recordarán como un ser humano maravilloso que amaba su arte y que lamentablemente murió demasiado joven".

– John “Dandy” Rodríguez, percusionista

Los últimos años

Más adelante, los problemas de salud no permitieron al Sr. Paunetto desarrollarse completamente como artista de grabación e interpretación, y dejó de actuar por completo en 1978. Sin embargo, logró producir dos obras maestras durante los años entre 1974 y 1976. En esas sesiones posteriores se unieron a él Ed Byrne y Todd Anderson (ambos egresados del Berklee) y luminarias como el baterista Tom Sala, y los saxofonistas Justo Almario y Bill Drewes. También reunió a algunos de los mejores percusionistas del área de la ciudad de Nueva York, entre ellos Gene Golden y Jerry González. A continuación, se muestra una breve reseña de estas gemas clásicas.

1977 - Paunetto’s Point • Commit to Memory

1977 - Paunetto’s Point • Commit to Memory

1977 - Paunetto’s Point • Commit to Memory (Pathfinder Records, PLP-1775, 1975 and PLP-1776, 1977)

Los álbumes antes mencionados contenían material fresco e innovador (y bastante inspirador, por cierto), pero seguían siendo relativamente desconocidos (al igual que los primeros trabajos de Bobby). Todo eso cambió en 1998, cuando una reedición en doble CD combinó los dos álbumes (Paunetto’s Point y Commit to Memory) y llevó la música de Bobby a una nueva generación de amantes del jazz. Su principal inspiración para el primero tuvo que haber sido Cal Tjader, y hay momentos en ese álbum que recuerdan mucho a Cal. Curiosamente, el tema que da título al disco ("Paunetto's Point") apareció en una grabación de Cal de 1962 para el sello Verve (In A Latin Bag). En el último disco de Bobby los resultados son mucho más originales. La música de este álbum es a menudo impredecible, con una serie de movimientos que ocurren simultáneamente, restando énfasis al elemento de baile que era tan característico de los primeros artistas del jazz latino como Tjader, Mongo, Gutiérrez y Mann.

En el Punto de Paunetto (Paunetto's Point), el material es igual de creativo, pero no tan recargado. Es la diferencia entre una orquesta de cámara y una sinfonía completa. "Brother Will", "A Hybrid Situation", "Paunetto's Point", "In Time's Time", "Sognord", "Fenwey Funk", "Osiris" y "Heavy on the Bacon" son obras maestras por derecho propio, y deberían también considerarse de escucha obligatoria para los amantes del jazz. Juntos, estos dos álbumes son colosales. Si uno escucha esta reedición, la música suena fresca, aunque fue creada hace más de veinte años antes de que el estilo de fusión se hiciera popular. En cuanto al sonido, Fred Weinberg ocupa un lugar destacado en la parte técnica del primero, que suena ligero, mientras que el denso Commit To Memory es una colaboración entre Jim Czak, Todd Anderson y Bobby Paunetto. Este álbum fue nominado al Grammy en 1975-76.

Commit to Memory reúne a un grupo de músicos mucho más grande, entre ellos los pianistas Edy Martínez y Armen Donelian; el trompetista Tom Harrell, el ya mencionado Ed Byrne; el guitarrista John Scofield; los saxofonistas Todd Anderson y Ronnie Cuber. En este álbum participaron cerca de 40 músicos, a diferencia del anterior, aunque en ambos participaron los mismos trompetistas. Bobby contribuyó con la mayor parte de los originales y aparece en el conjunto, ejecutando algunos hermosos solos, mientras que generosamente presenta a sus acompañantes en todo el proyecto. "Spanish Maiden", "Taz", "Catalano", "Dragon Breath", "Mediterráneo", "Little Ricco's Theme", "Delta", "Coral" y "Good Bucks" cobran vida propia, sin dejar de ser fieles al concepto general del productor, compositor y arreglista Bobby Paunetto. Esta es su obra maestra, sin duda.

1975 - Paunetto’s Point

1975 - Paunetto’s Point

1975 - Paunetto’s Point - (Pathfinder Records, PLP-1775, 1975)

Temas: 1. Brother Will; 2. A Hybrid Situation; 3. Paunetto's Point; 4. In Time's Time; 5. Sognord; 6. Fenway Funk; 7. Osiris; 8. Heavy on the Bacon.

Personal: Bobby Paunetto, vibráfono, cencerro, piano acústico y eléctrico; Tom Sala, batería; Fred Munar, timbales y campanas chinas; Andy González, bajo, campanas chinas, clave, güiro y campanas variadas; Jerry González, tumbadora, chekere y quinto; John Marrero, piano acústico y eléctrico; Tom Harrel, trompeta y flugelhorn; Ed Byrne, trombones de válvulas y vara; Bill Drewes, saxofón soprano, tenor y alto; Todd Anderson, saxofón tenor y flauta; Ron Cuber, saxofón barítono y alto, flauta y clarinete bajo.

Invitados: Charlie Burnham y Alfredo de La Fé, violines; Ashley Richardson, viola; Ron Lipscomb, violonchelo; Mario Rivera, saxofón barítono y tenor, flauta; Manny Oquendo, tumbadora y cencerro; John “Dandy” Rodríguez, batería de songo, cencerro, Milton Cardona, tumbadora, güiro y clave.

1977 - Commit to Memory - Bobby Paunetto

1977 - Commit to Memory - Bobby Paunetto
1977 - Commit to Memory - Bobby Paunetto (Pathfinder Records, PLP-1776, 1977)

Temas: 1. Spanish Maiden; 2. Taz; 3. Catalano; 4. Dragon Breath; 5. Mediterráneo; 6. Little Rico’s Theme; 7. Delta; 8. Coral; 9. Good Bucks.

Personal: Bobby Paunetto, vibráfono, piano, percusión, dirección musical, composición; Tom Harrell, trompeta; Mike Richmond, contrabajo; Abraham Laboriel, bajo eléctrico; Billy Drewes, saxofónes soprano, alto y tenor; Glenn Drewes, trompeta, fliscorno; Armen Donelian, piano; Edy Martínez, piano; Todd Anderson, saxo y flauta, productor, remezclador, mezclador e ingeniero de doblaje; Ronnie Cuber, saxofones barítono y alto, clarinete bajo y flauta; Ed Byrne, trombón; Tom Sala, batería; Frank Malabé, percusión; Jon Kass, violín y viola.

Jim Czak, productor, ingeniero, remezcla, mezcla, supervisión de restauración; John Post, supervisión de restauración; Michael Rozek, notas del transatlántico; Jeff Schwartz, ingeniero; Sam Feldman, masterización; Karen Kuehn, fotografía; Ben Mapp, dirección de arte, diseño; Walter Vélez, ilustración; Warren Evans, masterización; Jodi Petlin, coordinación; Yvette Mangual, dirección de arte, diseño; Robert Arnold, coordinación; Fred Weinberg, productor, ingeniero, remezcla.

Sólo recuerdo experiencias agradables con Bobby, como la vez que me pidió que pusiera un tambor batá en "Good Bucks" durante la sesión de "Commit To Memory". Me informó de que no había nadie más disponible para hacer las otras partes, así que le dije que haría las tres partes. Fue una primicia en el jazz latino.

- Gene Golden, maestro baterista y folclorista

Conceptos en unidad

El trabajo de Paunetto como arreglista en los dos álbumes de Pathfinder ha cosechado un millón de elogios, pero se ha dicho o escrito muy poco sobre su arreglo de "Corta el Bonche" del sonero cubano Alberto Ruíz, incluido en la segunda grabación del Grupo Folklórico y Experimental Nuevayorquino, “Lo dice todo”. Cabe destacar que Bobby ya había grabado "Bonche" en su propio disco Paunetto's Point y que para ese momento lo había reorganizado nuevamente para adaptarlo al estilo del grupo que sonaba más étnico. Esta guaracha clásica es considerada por muchos como uno de los aspectos más destacados del efímero grupo, junto con “Cuba Linda”, de su lanzamiento inicial Concepts in Unity. La versión folclórica de “Corta el Bonche” difiere de la de Bobby, en que fue construida sobre y alrededor del formato básico de la charanga ― traído a la vida por los violinistas Alfredo de la Fe, Noel de Costa, Gail Dixon y el violonchelista Ron Libscomb ― al cual Bobby agregó algunas armonías de jazz muy poco ortodoxas al patrón rítmico ya pesado. Están sucediendo muchas cosas en este número; guaguancó para los primeros compases y también algunos patrones de danzón, y voces que fluctúan del canto en armonía al unísono. “Corta el Bonche” es una obra de arte total, y cualquier persona con oído para la estructura puede escuchar que los músicos la trabajaron a la perfección, eludiendo el formato de descarga y adhiriéndose al arreglo (sin perder el sonido de estilo libre que prevaleció durante todo el resto del álbum). Esto era muy típico de los arreglistas neoyorquinos, que estaban más que dispuestos a dar una nueva cara a los viejos estándares cubanos, renovando la forma y la estructura estándar. La alineación también fue estupenda; los trombonistas José Rodríguez y Reinaldo Jorge; el flautista Gonzalo Fernández; el trompetista Alfredo “Chocolate” Armenteros; los vocalistas Willie García, Virgilio Martí, Marcelino Guerra, Heny Alvarez y Rubén Blades; el tresero Nelson González; el pianista Oscar Hernández y el bajista Andy González. Los percusionistas fueron Gene Golden, Frankie Rodríguez, Julito Collazo, Milton Cardona, Frank Malabé y Jerry González.

Tuve el honor de conocer a Bobby Vince Paunetto cuando era un músico prometedor en Nueva York. La música de Bobby tuvo un efecto indeleble en mí y sería una influencia que me ha durado hasta el día de hoy. Bobby venía a mi casa y tocaba mi piano durante horas y horas. Su pasión y su sentido armónico únicos, para componer y arreglar en efecto, eran mágicos. Estas cualidades son evidentes en todas sus grabaciones que todavía escucho. Tuve mucha suerte de tenerlo como amigo y mentor. Me pidió que pusiera un tambor batá en “Good Bucks” durante la sesión de “Commit to Memory”. Me informó que no había nadie más disponible para hacer las otras partes, así que dije que haría las tres partes. Fue una novedad en el jazz latino.

- Oscar Hernández, pianista, compositor y director de orquesta

Compositor en público (1996) • Reconstituted (1999)

El último esfuerzo de Bobby Paunetto como líder de una banda fue un noneto (tres saxofones, trompeta, flugelhorn, trombón, piano, bajo y batería). Debido a su enfermedad, fue bastante difícil para Bobby Paunetto tocar, pero su mente estaba lucida, por lo que los bautizó como "Commit to Memory Band” y les dio su bendición. Colectivamente produjeron dos álbumes bajo ese nombre. Cuando salió su segundo álbum, Bobby tenía 55 años y no podía tocar, pero aun así continuó escribiendo y arreglando.

"Commit to Memory Band" de Bobby estaba compuesto por algunos de los acompañantes más respetados del área de la ciudad de Nueva York, músicos de primer nivel a quienes se les dieron sus propios espacios en los que brillar. El trompetista Tom Harrell, el pianista Armen Donelian y el bajista Mike Richmond, el pianista Bill O'Connell, los saxofonistas Todd Anderson, Gary Smulyan y Billy Drewes, el trompetista Glenn Drewes, el trombonista Larry Farrell y el baterista John Riley son algunos de los que brillan en estas grabaciones. Hay varios números dedicados y algunas canciones que sugieren "smooth jazz", pero están bien ejecutadas y no carecen de sentimiento.

Su primer álbum fue un CD titulado Composer in Public. Se les llamó como Bobby Vince Paunetto & The C.T.M. Banda (CD – 1777, NYC, 1996). Todas las melodías fueron escritas, arregladas y dirigidas por Bobby. La producción estuvo a cargo de Bobby Paunetto, Denny Bridges y Todd Anderson.

Uno de los alumnos más privilegiados del maestro Tito Puente, lo fue Bobby Vince Paunetto, influenciado por grandes músicos como Cal Tjader, a quien se refería como un amigo. Marcó un gran hito en la historia del jazz latino, y el idioma lo reconoce como uno de sus exponentes más representativos, tanto por su talento como por la calidad de su sonido. Propuso un enfoque modernista para su época y solo ahora, varias décadas después, ha llegado a recibir el reconocimiento que se merece.

– Rolando Posada, publicación “Salsa y Timbal”, Medellín, Colombia

Bobby Vince Paunetto & The C.T.M. Band - Compositor en público

Bobby Vince Paunetto & The C.T.M. Band - Compositor en público

Bobby Vince Paunetto & The C.T.M. Band - Compositor en público

Temas: 1. You're Jiving me Crazy; 2. Movies; 3. Bottle The Edge; 4. Romancing A Whisper; 5. When I Got Disconnected; 6. Composer In Public; 7. The Beautifully Flawed Game; 8. You're A Wonderment; 9. Say It Now; 10. The Foundlings; 11. Jacket Lusteners; 12. If Yes...; 13. Love Seems To Find (The One That Brings It Home).

Personal: Bill O' Connell: piano y Yamaha DX7; Armen Donelian: piano, Yamaha DX7 y piano eléctrico Roland; Mike Richmond: bajo acústico; Chip Jackson: bajo acústico y eléctrico; John Riley: batería; Bill Bickford: guitarra y voz; Glenn Drewes: trompa y trompeta; Billy Drewes: flauta, saxofón soprano y tenor; Todd Anderson: flauta y saxofón tenor; Gary Smulyan: saxofón barítono y clarinete bajo; Jon Kass: violines y viola; Christine Gummere: chelo; Madeline Kole: voz; Devorah Segall: voz; Ann Belmont: voz y guitarra; Bobby Vince Paunetto: vibráfono (Degan Royal Aurora), sintetizador de vibráfono y Yamaha DX7.

CD Composer in Public [1999], la foto de la portada es cortesía de David Cantrell.

Bobby Vince Paunetto fue un talentoso compositor y arreglista cuya música resiste el paso del tiempo. Sus hermosas melodías emergen y proporcionan magníficos fondos para los solistas. Su música habla de lo amable y sensible que era. Pasamos muchas tardes escuchando cintas de casetes con nuevas composiciones que él pensaba grabar. Es una pena que haya muerto tan joven. Tenía mucha más música hermosa que ofrecer al mundo.

– Marty Sheller, arreglista y compositor

Reconstituted

Compositor en público

Bobby Vince Paunetto and The Commit to Memory Band – Reconstituted

Temas: 1. ¡Silva! ¡Horn! And Down Pat!; 2. Reconstituido; 3. Copas extranjeras; 4. Curvas eslovenas; 5. Dirt Cheap Meets Dirt; 6. En el puerto de Cádiz; 7. Jazz para la mayoría silenciosa; 8. Encendiendo los recuerdos; 9. Moneda emocional; 10. La alubia de la contra; 11. Co-Hearsed; 12.My Brother The Great!

Personal: Bobby Paunetto, compositor, arreglista, director y productor; Todd Anderson, saxofón y flauta; Tom Harrell, trompeta; Larry Farrell, trombón; Glen Drewes, trompeta; Gary Smulyan, saxofón barítono y clarinete bajo; Billy Drewes, saxofones soprano y alto, flauta y batería; Bill O'Connell, pianos acústicos y eléctricos; Mike Richmond, contrabajo; John Riley, batería.

CD Reconstituted [1999], la foto de la portada es de cortesía de David Cantrell

Robert Vincent Paunetto falleció el 10 de agosto de 2010, en la misma ciudad que le vio nacer. Llevaba muchos años padeciendo esclerosis múltiple. Durante los quince años previos a su muerte, cientos de jóvenes artistas novedosos, escritores y amantes del jazz no se dieron por enterados, dejando al Sr. Paunetto en una especie de limbo latino/jazzístico. Su anonimato se debió en parte a la falta de exposición y/o promoción (al fin y al cabo, era el único propietario de un sello independiente, una rareza en esos días).

La buena noticia es que, en los últimos años, una red novedosa de coleccionistas de jazz de todo el mundo (a través de Internet) ha comenzado a dejar las cosas claras y hacer las cosas bien para el señor Paunetto. Sus criterios son el mismo que el de Bobby: dejar que (el público) escuche la música con la mente y no sólo con los pies. Que saboreen la belleza del conjunto, del genio de la composición y del arte del instrumentista, en lugar de limitarse a bailar enloquecidamente al compás de un ritmo. Al igual que Bobby, desean que tanto el músico como el aficionado aprecien el arte de los arreglos, en lugar de centrar su atención en un juego elegante de pasos o en letras repetitivas (pero pegajosas). La perspectiva de Bobby Paunetto sobre la música (su "punto" de vista, por así decirlo) estaba en sintonía con los tres elementos humanos básicos: cuerpo, mente y espíritu. Desde el principio de su carrera discográfica independiente, su objetivo había sido rodearse de verdaderos artistas, amantes del jazz como él; con las mismas capacidades y sensibilidades que la suya; amantes del jazz que hablaran el mismo idioma (musical) y se adhirieran al mismo tipo de disciplina que él; artistas capaces de expresarse con profundidad y alma interior. Individualmente y colectivamente tenían que ser capaces de conmover y atraer al oyente lejos de la pista de baile y hacia un espacio más cerebral. A juzgar por la música que estampó en sus álbumes, Bobby Paunetto logró ese objetivo. Seleccionó lo mejor de todos y cada uno de los músicos con los que grabó. Su aportación colectiva hizo que la música de Paunetto fuera vívida, imaginativa y estimulante para el intelecto, a la vez que alimentaba el alma. La música procedía de muchas culturas diferentes, pero no era en absoluto una mezcla étnica heterogénea. Los músicos eran tan diversos en sus orígenes como en cualquier parte del mundo, pero no se trataba de una mezcolanza.

Puede que se haya originado en la mente multicultural de Bobby, pero fueron sus músicos quienes aportaron que todo su mundo fuera viable y real. También lo mantuvieron con los pies en la tierra. Pusieron el cuerpo y sus sentidos en movimiento, pero no se trataba de una mera manifestación comercial de las raíces, ni de una moda para sacar provecho mientras estuviera "caliente". Tampoco era una especie de locuacidad sofisticada de sociedad. Era una música hermosa, tal y como la concibió Bobby Paunetto, y resultó ser intemporal. Incluso los fanáticos de nivel promedio sucumbirían completamente a ese torrente de musicalidad. Cuando yo era un joven que escuchaba estos álbumes por primera vez hace más de cuarenta años, sentí que el Sr. Paunetto había dejado claro su punto y, en ese sentido, supongo que también era un gran productor. Tenía el don de comunicar al músico y al público, y esa habilidad también estaba en el centro de su música. Sólo se puede especular sobre el rumbo que habría tomado su carrera si hubiera firmado con un gran sello discográfico, lamentablemente sucumbió a una enfermedad tan terrible como la esclerosis múltiple.

Toda la comunidad de músicos de Nueva York y de otros lugares se entristeció profundamente cuando Bobby falleció. Iconos como Golden, García, Martínez, Donelian, Almario, Byrne y Cuber (entre tantos otros fuertemente influidos por este afable genio), han mantenido viva, cada uno a su manera, la música de Bobby Paunetto.

Chico Álvarez Peraza

Chico Álvarez Peraza

Director de orquesta, vocalista, compositor, artista gráfico y locutor de radio Ernesto "Chico" Álvarez Peraza se ha presentado como cantante y percusionista en el área tri-estatal de la ciudad de Nueva York durante las últimas cuatro décadas. Líder del conjunto Mafimba y The Palomonte Afro-Cuban Big Band, también fue el presentador y productor de New World Gallery, un ecléctico programa de radio de música del mundo que se emitía por WBAI Pacifica Radio (99.5 FM) durante más de 25 años.

Bobby Paunetto, New York City and The Synthesis of Music - Latin Jazz Network