Las Cosas del Alma de Adalberto Santiago

 

Entrevista a Adalberto HL

Adalberto Santiago conversa con Eric González

Foto de Eric González

 

 

 

Texto y Fotografías por ©Eric E. González

Otras fotos de ©Martín Cohen

Miembro Fundador de HL.

cueroestirao@yahoo.com

 

 

Esta entrevista fue realizada en mayo 23, 2003 y octubre 27, 2004

 

     En la música afrocubana y afrocaribeña, cuando mencionamos el nombre Ray Barretto, inmediatamente nos viene a la mente el de Adalberto Santiago. Y es que tiene que ser así, debido a que las mejores grabaciones que hizo Barretto en su periodo de salsa, las que más recordamos, fueron las que realizó con Adalberto como cantante

 

     ¿Quién, por ejemplo, no se acuerda de “Mírame de Frente”, “Se Traba”, Alma con Alma”, “Arrepiéntete”, “Que Viva la Música”, “Bruca Manigua”, “Adelante siempre voy”, “Al ver sus campos”, “Oye la noticia”, “Hipocresía y Falsedad”, “Vive y vacila”, y, claro está, “Quítate la Máscara”?  Estos y tantos otros son temas que dejó esta exitosa combinación durante los años del “boom” salsero. 

 

     Pero, por supuesto, la historia de este formidable intérprete no empieza ni termina allí.  Habiendo comenzado en su natal Puerto Rico con la orquesta de Chuíto Vélez (recordado pachanguero), para después pasar a las filas de Barretto, Adalberto Santiago fue miembro de una de las más creativas orquestas de los años de la salsa en Nueva York: La Típica 73. Esta agrupación, formada en parte por músicos que desertaron de la organización de Barreto – siendo Santiago su cantante estelar –  dejó números inolvidables como “Mañoñó”,  “Así no se quiere a nadie”, “Amalia Batista”, “Canuto”, “La Candela”, entre otros. Luego, como ya sabemos, Adalberto y Orestes Vilató crean otro formidable grupo de nombre “Los Kimbos”, con quien grabó la memorable pieza “Lágrimas Negras”.  De los Kimbos, Santiago se enrumbó como solista.

 

     Sin embargo, Adalberto Santiago tuvo el privilegio de formar parte de la que posiblemente es la agrupación musical más famosa y poderosa en la historia de la salsa (excluyendo a Cuba, si así se quiere): Las Estrellas de Fania.  Y, cuando digo formar parte, me refiero a que él fue miembro fundador de esta importante agrupación – no sólo en el histórico concierto en el Cheetah, sino también en la primera reunión celebrada unos años antes en el Red Garter.

 

     Hoy día, Adalberto Santiago sigue activo y su voz mejor que nunca.  Además de su carrera como solista, todavía participa en las presentaciones esporádicas de Las Estrellas de Fania, así como en las reuniones de la Típica 73 y la orquesta de Ray Barretto.

 

      Entrevisté a este gran cantante durante su visita a Los Ángeles, California, en donde se presentaba con Ray Barretto en el Quinto Congreso de la Salsa de la Costa Oeste, organizado por Albert Torres Productions. En esa ocasión, Barretto dijo algo así: “He tenido muchos buenos cantantes, pero para mí, el Papi Chulo (querendón) sigue siendo Adalberto”.  Eso lo dice todo, mis estimados amigos y amigas.

 

Volví a hablar con Adalberto recientemente. Él acababa de regresar a Nueva York, de una presentación en Miami, y al día siguiente se preparaba para otro trabajo en la hermana Republica de Ecuador.

 

Agradecimientos:   Mi más profunda gratitud a mi primo Bruce Brewer, por toda su ayuda para completar este trabajo, al igual que a Emilio Santiago y Rafael Bracho, quienes también pusieron  sus granitos de arena. Por supuesto, mil gracias a mi hermano de Herencia Latina, Israel Sánchez-Coll, por la ardua tarea de hacer que esta entrevista se vea atractiva y de calidad. Esta conversación no hubiera sido posible sin el apoyo de Albert Torres, quien sólo trae salsa de calidad a Los Angeles, California.

 

 

Eric E. González (EEG):   Me gustaría que comenzáramos hablando un poco de tu lugar de nacimiento. Tengo entendido que fue Pozas de Ciales.

 

Adalberto Santiago (AS):   Sí, en el barrio de Pozas, en Ciales, Puerto Rico – un pueblo de la Isla.  Nací el día 23 de abril de 1937. Cumplí los 66 ya. Orgulloso me siento de tener la edad, y de haber llegado.

 

EEG:    ¿Había músicos en tu familia?

 

AS:   Bueno, mi papá, digamos, fue músico por diversión – de hobby –, y nunca tuvo la dicha de vivir de la música.  Pero, gracias a Dios, a mí me interesó la música desde que nací, y de eso prácticamente he vivido.

 

EEG:   ¿Qué música se escuchaba en tu hogar?  Entrev. A Adalberto HL

 

AS:   Bueno, cuando más niño, [me gustaba] la música de nosotros: la bomba, la plena, el aguinaldo... Y, también, la cuestión de los tríos. Yo empecé desde temprana edad a tocar la guitarra y a hacer voces con tríos.  De allí, pues, ya pasé a la ciudad de Nueva York.

 

EEG:   Antes de irnos para Nueva York, me gustaría que hablaras sobre tus conocimientos en tocar el bajo.

 

AS:   Sí, yo toqué bajo por once años con la Orquesta de Chuito Vélez.

 

EEG:   ¿Dónde aprendiste a tocar el bajo?

 

AS:   Bueno, aprendí a tocar la guitarra primero y después estudié el bajo por cuenta mía.  Tocaba bajo y cantaba.  Lo que hace Oscar D’León, ya yo lo había hecho hace rato.

 

EEG:   ¿Fue eso en Puerto Rico o Nueva York?

 

AS: En Puerto Rico y Nueva York. En 1956, cuando yo llegué de Puerto Rico a Nueva York, estaba la fiebre de Elvis Presley, y me pusieron “el Elvis Presley puertorriqueño”, porque bailaba y cantaba con la guitarra.

 

EEG:   ¿Recuerdas algunos de los grupos con los que tocaste en Puerto Rico?

 

AS:   Bueno, empecé con grupos, digamos, que de barrio. Fuimos a emisoras; me gradué de un programa de aficionados titulado “Tribuna del Arte”, donde el que conducía el programa era Don Rafael Quiñones Vidal.  Por allí pasaron muchas celebridades, como Carmita Jiménez, Felipe Rodríguez, Bobby Capó... toda esa gente.

 

     Entonces, de ahí me gradué en 1955, e ingresé al grupo de Chuito Vélez, en San Juan. Ya yo vivía en la capital.  Entonces, pues, viajé a la ciudad de Nueva York en 1956 con la orquesta de Chuito Vélez.

 

EEG:   Entonces se puede decir que la razón por la cual fuiste a Nueva York, fue debido a que eras parte de la orquesta de Chuito Vélez. Eso fue lo que te llevó a Nueva York.

 

AS:   Ajá, así es. Como parte del grupo. Fuimos a hacer teatros, algunos clubes nocturnos, pero con la música de bomba y plena. 

 

EEG:   Los teatros eran muy populares con el público hispano en esos tiempos. ¿Recuerdas en qué teatros tocaron?

 

AS:   El Teatro Puerto Rico.  Allí estuve con un elenco, como Marco Antonio Muñiz, cuando estaba con Los Tres Ases; Lucecita Benítez, empezando su carrera; Cuarteto Los Hispanos...

 

     Entonces, regresé a Puerto Rico y terminé la escuela. Volví a Nueva York en los ’57. Regresé a Puerto Rico de nuevo, y en el ’59 decidí irme para Nueva York, pues me había ido más bien en Nueva York. Tú sabes que de Puerto Rico a Nueva York son tres horas. (RISAS DE ADALBERTO)

 

EEG:   Ahora que mencionas los teatros, me imagino que trabajaste con La Lupe.

 

AS:   Llegué también a acompañar a la Lupe en el último concierto o baile que ella hizo. Yo la acompañé con mi orquesta. Fue una tremenda persona. Visitó mi casa, conoció mi familia. No era el ser humano artista, sino el ser humano que compartía con sus amistades.

 

  Entrev. a Adalberto HL     Entrev. a Adalberto HL

Una de las Orquestas más  recordada en Suramérica, La  Orquesta de Chuito Veléz

 

EEG:   ¿Llegaste a grabar con Chuito Vélez?

 

AS:   Llegué a grabar unos tres LP’s que se escucharon bastante en Centro y Sudamérica (1).  Nosotros tocábamos de todo, porque Chuíto Vélez tenía dos cantantes en ese tiempo, y yo tocaba el bajo y la guitarra.  Entonces el guitarrista tocaba la guitarra, y nos pasábamos el bajo, y así – intercambiábamos de número. Tenían un bolerista y yo era el guarachero. Tocábamos de todo. Tocábamos merengue, guaracha, paso doble, danzón... de todo. Era un grupo bailable.


EEG:   ¿Qué tan exitosa fue esa orquesta?

 

AS:   Bueno, tocábamos y no habíamos grabado todavía. Trabajábamos tres días a la semana de planta en un lugar: el club Caborrojeño.

 

EEG:   ¿Con quién estuviste luego de Chuíto Vélez?  Me parece que también cantaste con Willie Rodríguez, ¿no?

 

AS:   Lo que pasa es que yo, estando con Chuíto Vélez, grabé con diferentes compañías y diferentes grupos, buscando, como dice uno, la inquietud.  Entonces grabé con Willie Rodríguez, con Willie Rosario... grabé LPs yo solo.

 

 

 

EEG:   Con Willie Rodríguez grabaste “Heat Wave”.

 

AS:      Herencia LatinaEn “Heat Wave” hice un par de números y en “Colorín Colorao”. Ese fue otro disco.  Willie Rodríguez era un trompetista. En ese tiempo, la orquesta de Ricardo Ray y Bobby Cruz tocaban para el sello Fonseca.  Entonces, ese mismo grupo lo usaron para que yo cantara ese número con el nombre de Willie Rodríguez.

 

EEG:   Entonces era la orquesta de Richie Ray y Bobby Cruz.

 

AS:    (RISAS DE ADALBERTO) Estaba toda esa gente (2).

 

EEG:  ¿Recuerdas más o menos en qué año fue eso?

 

AS:  Eso fue en los años ’62, más o menos.

 

EEG:   ¿Salieron esos LPs para el sello Mary Lou?

 

AS:   No sé si fue Mary Lou o si fue [el sello] Fonseca (2).

 

EEG:   ¿Qué pasó luego de tus grabaciones con Willie Rodríguez?

 

AS:   Después grabé con Chuíto Vélez otras cosas, y luego grabé con Willie Rosario (3).

 

EEG:   ¿Fuiste parte de la orquesta de Willie Rosario?

 

AS:   No, no. Yo fui cantante de grabación, y viajé por primera vez a Venezuela en 1966. El primer viaje que hice fuera de Nueva York, internacional, fue a Venezuela en el ’66 [con la orquesta de Willie Rosario]. Tuvimos una semana trabajando en Venezuela, en un lugar que se llamaba “Barnum”.  Ahí yo fui de cantante nada más. Había otro cantante – dos cantantes. Fui como cantante, no fui a tocar el bajo. Y me sentí más flexible.  Entonces yo dije: “Bueno, yo creo que voy a tener que soltar el bajo. El primero que me llame para soltar el bajo, me voy”.  Después, cuando llegué a la ciudad de Nueva York, dejé a alguien reemplazándome como cantante y como bajista con Chuíto Vélez. Y, cuando me llamó Ray Barretto para su orquesta,  pues allí entré con él, que fue a mediados de 1966. Entre 1966 y 1967.

 

Herencia Latina

La Banda de Ray Barretto: Oreste Vilato, Ray Barretto, Adalberto Santiago y Johnny Dandi. 

Foto tomada por  Martín Cohen.

 

EEG:   ¿Cómo conociste a Ray Barretto?

 

AS:   En el Caborrojeño, los domingos, trabajaban diferentes orquestas y artistas como atracciones.  Los muchachos que trabajaban con Ray Barretto – Orestes Vilató y Roberto Rodríguez – me conocían. Se le había ido el cantante a Barretto.

 

EEG:    ¿Quién era ese cantante?

 

AS: En ese tiempo, si no me equivoco, era Manny Román. Tenían problemas con él, con la cuestión de la bebida, etc., etc.  Barretto quería cambiar de cantante, y entonces Orestes Vilató y Roberto Rodríguez le dijeron: “Mira, nosotros vamos a un lugar, y ahí hay muchacho que toca bajo y canta, y creemos que sería la persona [ideal] para la orquesta”.  Entonces, cuando me vio cantar, pues me habló, entramos en negociaciones, y me fui a trabajar con él.

 

EEG:   ¿Qué formato de orquesta tenía Barretto para ese tiempo? ¿Todavía tenía sus violines?

 

AS: Ya tenía trompeta y trombón, pero tenía violines.

 

EEG:   Eso sería entonces cuando grabó “Happy Birthday Everybody”.

 

AS:   ¡Ajá!  Eso, y se grabó (PROCEDE A CANTAR): “Negro Congo tú tienes bilongo”, con la United Artists.

 

EEG:    Barretto no estaba con Fania todavía. Eso quiere decir que entraste a su orquesta antes de Fania.

 

AS:    Ajá, antes de Fania. No era Fania todavía.  Después, cuando entramos al sello Fania, pues se grabó el primer LP, que fue “Acid”, que tiene “Sola te dejaré”.

 

EEG:   ¿Grabaron “Acid” antes que “Latino con Soul”? 

 

AS:   Fue después que “Latino con Soul”. 

 

EEG:   Entonces “Latino con Soul” fue el primero que grabaste con Barretto.

 

AS:   Sí, ajá.

 

EEG:   ¿Cómo recibió el público “Latino con Soul”? 

 

AS: Bueno, me ayudó a mí en ciertos aspectos. Modestia aparte, ya yo venía de la calle, de los clubes, y ya yo tenía tarima. Eso me ayudó bastante con la gente, con el público. Once años trabajando con orquestas de planta, uno coge cierta experiencia. Eso ayudó a la orquesta de Barretto y me ayudó a mí también, para conocerme en la calle, porque no es lo mismo trabajar en un sitio de planta, que en la calle. La aceptación de la calle fue fantástica, quizás por la experiencia que no me trajo otro grupo por once años.

 

EEG:   ¿Tuvo “Latino con Soul” algún tema en particular que impactó?

 

AS:   Bueno, Barretto trabajaba bastante, y la sacada del LP se proyectó bastante bien. Y el segundo, que fue de Fania, tuvo un sólo número latino (“Sola te dejaré”, del LP “Acid”), porque en ese tiempo se grababa más americano. Y fue el [tema] que pegó allá en Venezuela, y con eso nosotros viajamos. 

 

     Después vinieron [los LPs] “Hard Hands”, “Power”, “Together”, “The Message”, y “Que Viva la Música”.

 

EEG:   Vamos a hablar de algunos de esos álbumes. ¿Qué me puedes decir de “Barretto Power”?

 

Herencia LatinaAS:   Cuando estaba con Barretto, ese grupo estaba bien formado y hacíamos los arreglos, etc., nosotros los tocábamos, los trabajábamos siempre con el público. Tocábamos los discos para la gente, y, según la reacción de la gente – si les gustaba la letra o el ritmo –, según ellos los sentían, entonces nosotros los grabábamos. Si nosotros nos dábamos cuenta de que no llegaba tanto, pues entonces seguíamos con el mismo número, haciéndole otras cosas.  O sea, los números se elaboraban, y sonaban como si fueran en vivo. Digo, casi siempre se grabó en vivo en esa época.

 

EEG:   En ese álbum está el tema “Quítate la máscara”, que es posiblemente con el que la gente más te identifica. ¿Pensaban ustedes que iba a ser hit?

 

AS:    Bueno, sí, porque tenía algo humorístico también, tú sabes. 

 

EEG:   Uno de mis temas favoritos en esa producción es “Oye la Noticia”, escrito por el propio Barretto. ¿Fue ese número dirigido contra alguien en especial?

 

AS:    Ese número lo escribió Barretto y, si no me equivoco, fue para [Tito] Puente. (RISAS DE TODOS)

 

EEG:   Me imagino que fue por la competencia que existía entre algunas orquestas.

 

AS:    Sí. Es así en la salsa – la polémica y esas cosas, para la gente que lo envidiaba a él. No quiere decir que era para Puente directo, pero siempre había esa polémica.

 

EEG:   ¿Tienes algo que decir sobre el álbum “Together”?

 

AS:    Bueno, un disco es un niño que uno tiene, que nace, y hay que dedicarle tiempo a ese niño.  Todo lo que hago yo le pongo ciento y pico por ciento. [El tema] “Vive y Vacila” viene en un momento dado – Tony Fuentes, el bongosero,  fue el que escribió ese número --, y el número me llegó. 

 

EEG:   Se puede decir que el tema “No olvido a Caracas” fue por algún viaje que hicieron a Venezuela.

 

AS:   Eso sí, porque Caracas nos abrió la puerta bien a nosotros.  El primer país que yo visité como profesional fue con Willie Rosario, con quien grabé un LP, y fue Venezuela. Entonces, cuando se dio ese número, pues yo dije: “Ah, mira, el agradecimiento que uno le tiene [a Venezuela]”.

 

EEG:   ¿Y la pieza “Hipocresía y Falsedad”?

 

AS:    Eso lo escribió Barretto, y es una de esas cosas para dedicárselas no sé a quién.

 

EEG:   La portada del álbum “The Message” fue tomada en El Cheetah, ¿no?

 

AS:   Sí, en el Cheetah. Se hizo la carátula allí, y prácticamente se hizo casi todo en vivo.

 

EEG:   Tienes que tener un afecto especial por “Alma con alma”, ¿no?

 

AS:   “Alma con Alma” fue un palo en... Da la casualidad que en Panamá fue que empezó la controversia de “Alma con Alma”. Los panameños prácticamente fueron los que hicieron ese disco un hit.

 

EEG:   ¿Cuál fue esa controversia?

 

AS:   Bueno, digamos que por la dinámica esa de que en los lugares que uno trabajaba allá en Panamá, pues hacían transmisiones radiales.  Por ejemplo, en el Club de Yates y Pesca transmitían en vivo. Entonces lo grababan. Y, una vez, estábamos escuchando la emisora y salió la grabación en vivo de Barretto conmigo. Y la gente llamando [preguntando] por el número.  Ahí que el número, tras grabarse en vivo, se hizo hit. Aparte de Panamá, pegó mucho en Miami, Puerto Rico, y Nueva York. 

 

EEG:   ¿Cuándo fueron Barreto y tú a Panamá por primera vez?

 

AS:   Yo creo que fue prácticamente cuando salió ese número. Eso fue para los 1969.

 

EEG:   Me imagino que entonces tocaron para los carnavales.

 

AS:   Fíjate, si no me equivoco, fuimos con Barretto... Bueno, para los carnavales fue que fui para el Yates y Pesca.  Y hubo una presentación en los carnavales en la calle y en los toldos (4).

 

EEG:    En el álbum “Que Viva la Música” salió el tema “Cocinando”. ¿Cuál es su historia?

 

AS:   Eso fue como una descarguita que hicimos una vez. En un momento dado, no había mucha gente en el lugar, y empezábamos a hacer descarguitas. De allí salían muchas cosas – como un jam session, tú sabes.

 

 EEG: Y de ahí salió “Cocinando”.

 

AS:   De ahí salió “Cocinando”.

 

EEG:   En ese álbum también grabaron el clásico “Bruca Manigua”.

 

AS:   “Bruca Manigua” era un número de Arsenio Rodríguez.  [Lo hicimos] por la cuestión que estaba pasando (en los Estados Unidos), del racismo y eso.  Entonces mis inspiraciones [eran] por lo que estaba pasando en el ambiente.

 

EEG:   Después de un tiempo volviste a reunirte con Barretto en el álbum “Rican /Struction”.

 

AS:   Barretto me llamó y me dice: “Mira, Adalberto, hay un proyecto ahí, y quiero que tú lo hagas conmigo”. Él siempre me ha tenido cierto aprecio a mí, que es igualmente correspondido. Y, para un encuentro, ¿a quién iba a llamar?, sino que a mí. Bueno, modestia aparte. 

 

EEG:    Puede ser que los álbumes que grabaste con él son sus más exitosos económicamente.

 

AS:   Bueno, para mí, sí. ¡Y todavía se venden!  Igual con “Mañoñó” de la Típica ’73, que todavía vende más que todo lo que se ha hecho con los otros cantantes, e inclusive con los [otros] dos que yo hice [con la Típica].

 

EEG:   En el primer álbum de la Típica, hicieron un arreglo curioso de “Amalia Batista”, con imitaciones de ciertos personajes, incluyendo Al Jolson. ¿Cómo surgió ese segmento?

 

AS:   Fíjate que el grupo se destacó bastante, porque hacíamos cosas que no estaban en el arreglo.  Nos salían cosas en la tarima, y la gente gozaba con eso, tú sabes. Y entonces decidimos grabarlo en esa forma.

 

EEG:   ¿Cuál de todos esos álbumes llevas más adentro?

 

AS:   Fíjate, yo no tengo favoritismo por ninguno de esos discos, tú sabes.

 

EEG:   Fuiste uno de los originales de las Estrellas de Fania, y participaste en el concierto del Red Garter. ¿Qúe recuerdas de ese histórico evento?

 

AS:   Tengo recuerdos chéveres, porque nunca llegué a pensar de que me escogieran a mí como integrante de ese grupo.

 

EEG:   En esa ocasión, ¿quién escogió o cómo se escogieron los participantes del grupo?

 

AS:   Ese grupo fue escogido con cantantes de grupo, con directores, y algunos que otros músicos. Por ejemplo, nosotros tuvimos la dicha de tener cuatro de la orquesta de Ray Barretto, que fueron Orestes Vilató, Roberto Rodríguez – que en paz descanse –, Ray Barretto y yo. De la orquesta de Pacheco, fueron “Pete” Conde Rodríguez y Pacheco nada más. De la orquesta de Larry Harlow, fueron Larry Spencer, Ismael Miranda, y Larry Harlow... (7)

 

EEG:     Esa pareciera la lista de nombres de los artistas que participaron más tarde en el Cheetah. ¿Estamos hablando del Red Garter?

 

AS:    Sí, ese fue en el Red Garter. 

 

EEG:    Ese concierto no fue tan famoso como el del Cheetah. ¿Qué crees que pasó?

 

AS:   Eso fue que se hizo una descarga ahí, se grabó, gustó, y se siguió el evento. Eso va siguiendo una trayectoria, hasta que llegó el momento de la verdad, tú sabes.  Aún en el Cheetah, eso fue prácticamente también un jam session que hicimos.

 

EEG:   Pero el Cheetah fue un poco más organizado, ¿no?

 

AS:   Un poco.

 

EEG:   He entrevistado a varios de ustedes sobre el Cheetah, y he escuchado versiones diferentes. ¿Sabías que estaban filmando para hacer una película?

 

AS:   Bueno, yo sé que estaban grabando, pero no que estaban haciendo una película. No sabía.  Quizás cuando comenzaron los planes para hacer la película, escogieron uno que otro, pero yo no participé prácticamente como participó Barretto – nada más lo que se vio cantado.  Después me dijeron que era película, y dije: “Bueno, pues, chévere. No me invitaron, pero está bien: ¡Salí!”  (RISAS DE TODOS)

 

EEG:    ¿Por qué no participaste en el concierto en África?

 

AS:    A África yo fui, pero en 1968, con Barretto. Ese año fui por primera vez a África, uno de los primeros míos para África. Y entonces después fue la Fania  en 1974. Yo les dije que con todo gusto yo quería ir, pero que yo estaba con un grupo, que se llamaba la Típica ’73. Y había un solo cantante, demasiado trabajo, y no había a quién dejar.  Al que podía dejar era a Ismael, o gente de la misma Fania, tú sabes, que estuviera más relacionada con el tipo de números que yo hacía.

 

EEG:   Esa fue la razón oficial por la cual tú no fuiste.

 

AS:   Esa fue. Y tampoco pudo ir Orestes Vilató.

 

EEG:    Me imagino que también fue retribución porque algunos de ustedes dejaron la orquesta de Barretto para formar la Típica ’73. Puede ser difícil para ti hablar sobre ello.

 

AS:    Bueno, sí, pero yo puedo rectificar sobre eso. Hubo ciertas discrepancias sobre eso, ciertos enojos.  A mí me llamaron que si quería ir y viajar, ¿no?, cuando empezó a viajar la Fania – no sólo a África –, pero cuando empezó a viajar la Fania. Yo les dije: “Chévere. Sería chévere”.  [Y dijeron]: “Pero Barretto dice que tú puedes ir, pero que Orestes Vilató no puede ir”. Y yo les dije: “Bueno, pues, da la casualidad que si Orestes Vilató no va, pues yo no voy, porque marineros somos, y en el mar andamos, ¿no?”  Desde un punto de vista eso no se ve bien, pero esa fue su forma de sentir, y como quien dice: “El pez grande se come al más pequeño”.  Entonces Jerry [Masucci] se supone que quería mejor a Barretto, que a Orestes Vilató.  Entonces, por esa fricción que hubo allí, pues yo dije: “Jerry, con todo respeto, puede haber un tiempo chévere que yo pueda decir: ‘Bueno, ya yo estoy desligado de la Típica, estoy desligado de esto, y, si me quieren, aquí estoy’”. Y eso fue lo que hice; yo dejé mis puertas abiertas, yo hablé con la verdad.

 

EEG:   Entonces Barretto y tú no quedaron enemistados.

 

AS:   No sé. Yo nunca tuve ningún problema con Barretto.  Hemos sido amigos, más que amigos, y yo tengo que agradecerle mucho a nivel de que fue un padre musical para mí. Aprendí mucho, o aprendimos mucho todos los miembros.  

 

EEG:    ¿Era muy estricto?

 

AS:   No era muy estricto, pero le gustaban las cosas bien hechas. Le gustaba la limpieza en su grupo y todo el mundo era zanahoria (sano). ¿Sabes lo que te quiero decir? No había drogas, todo el mundo haciendo las cosas lo más [bien] que se pudo hacer, lo más bien.  No hubo fricción.  Quizás con Orestes hubo fricción, pero después se arreglaron las cosas, porque hicimos un LP en vivo en el Beacon Theatre (8).  Después en Puerto Rico, para el aniversario de él.  Y se juntó la Típica de nuevo con Barretto, por primera vez en Puerto Rico. Tú sabes, ya esas tensiones se acabaron. Cada vez que me encontraba con Barretto, él siempre recordando: “Vamos a dejar esa cosa, chico. No pienses en el ayer, piensa en lo que viene”. 

 

 

Adalberto en los estudios de grabación con Johnny Dandy y La Tipica 73. Foto de ©Martin Cohen

 

EEG:   ¿Cuál fue la razón por la cual dejaron a Barretto y formaron la Típica ’73?  Tengo entendido, por una entrevista que le hice a John “Dandy” Rodríguez, que una de las razones fue dinero.

 

AS:    Fíjate, para mí, el dinero... Yo nunca le pregunté a Barretto cuánto me voy a ganar por un guiso, ni nunca le pregunté cuánto me iba a ganar por un viaje.  Para mí, en aquellos tiempos, se tocaba más por amor a la música que por el dinero.  Entonces yo te diría que, en parte, fue una inquietud.  Como personas jóvenes, queríamos explorar algo, y hacer un grupo donde tocábamos de todo (9)

 

EEG:    Eso fue como resultado de los “jam sessions” (descargas) que tenían en el club “And Vinnie’s” los lunes.

 

AS:   Sí, los lunes. Y entonces después cogimos otro lugar los martes, y la gente nos seguía con el grupito. Y, ahí mismo en el lugar que tocábamos, hacíamos cosas inventadas, y así salían cosas de la naturaleza, de aquí, del corazón, de lo que es la música. Gracias a Dios, trabajamos los miércoles, entonces los jueves... ¡Nada más que nos faltaba llenar el libro de la semana con el viernes, sábado y domingo! 

 

     Nos reunimos, y dijimos: “Bueno, nos falta viernes, sábado y domingo”. Y, cuando Barretto tenía alguna actividad, esos cuatro o cinco músicos nos íbamos con él. Dejábamos otra gente con el grupo de jam o descarga, y hacíamos el trabajo con Barretto – nunca lo dejamos. Entonces llegó el momento de reunirnos, y [dijimos]: “Vamos a formar un grupo”. Y nosotros trabajábamos. Trabajábamos, a veces, ocho, nueve, diez bailes a la semana.  Nosotros trabajábamos, a veces, cuarenta bailes en el mes. 

 

EEG:   ¿Quién fue el director original de la Típica ’73?

 

AS:   ¡Nosotros mismos!  Nosotros éramos una cooperativa, donde cada cual... Por ejemplo, yo me dedicaba al ambiente latino, a lo que era latino, los clubes latinos.  Johnny se dedicaba a lo americano.  Cada cual tenía su función: El otro arreglaba, el otro buscaba números, etc. Alguno que otro tenía menos función, pero, al momento de la verdad, todo el mundo ponía su granito.

 

EEG:    Ustedes con la Típica tenían básicamente el mismo formato que la orquesta de Ray Barretto, con la diferencia de que la Típica tenía un trombón. ¿Cómo decidieron ustedes la orquestación del grupo? ¿Cuál fue el concepto inicial de la Típica?

 

AS:   Bueno, el concepto inicial de la Típica, en sí, fue que usábamos el violín, que fue Alfredo de la Fé; usábamos el tres, que fue Nelson González; Joe Manozzi y René López en la trompeta; y Orestes Vilató, que tocaba bongó y timbal a la vez... Entonces, teníamos conjunto y teníamos charanga.  Joe Manozzi en ese tiempo tocaba piano y tocaba trompeta. Y Leopoldo Pineda (trombón) también estaba en el guiso. Leopoldo vino de Santo Domingo. El tocaba en ese tiempo con Larry Harlow.

 

     Entonces, el formato no fue copiarse uno del otro. Teníamos ese formato, porque el trompeta Joe Manozzi se deriva de la flauta.  El escuchaba mucho a Arcaño y sus Maravillas, al flautista de la Aragón... Te diría que eso nos ayudó a nosotros a hacer la charanga. Tocábamos un número de charanga y un número de conjunto, tocábamos merengue, tocábamos de todo. 

 

EEG:    Pero, al principio, eventualmente el violín desapareció, debido a que Alfredo se tuvo que salir.

 

AS:   No, porque entonces no pensamos en violín, y [decidimos] usar dos trompetas y un trombón. Entonces Alfredo vino en la segunda etapa, que ya yo no estaba. También entró Tito Allen. Ya para la segunda etapa, cambiaron la instrumentación.

 

EEG:   Hiciste tres álbumes con la Típica ’73, siendo el último el que incluyó “La Candela”, un tema experimental que había hecho Juan Formell y los Van Van, en donde entraron a la onda areíto.

 

    

Los Kimbos: Eddie Montalvo, Nelson González, Adalberto Santiago y Orestes Vilato.

 

AS:   Sí, sí. Entonces hicimos Los Kimbos.

 

EEG:   Ajá, a eso vamos.  La versión oficial es que la Típica se disolvió por cuestiones religiosas – los santeros y los no santeros. ¿Cómo puede ser eso posible?

 

AS:   Bueno, esto hay que verlo desde dos puntos [de vista], tú sabes. Vinieron los celos profesionales. De que me anunciaban a mí como“¡Adalberto Santiago con la Típica “73!”  Entonces los muchachos querían tener el nombre de la Típica ’73 [solamente].  A el que me contrataba a mí, [yo le decía]: “Mira, yo quiero que tú les digas a esta gente de la forma que tú los anunciaste, y quiero que les expliques también que yo no fui el que te dije que los anunciaras así”. Bueno, hubieron momentos en que los empresarios les dijeron: “Miren, yo anuncio mi baile como me da la gana. Y el que tiene parado este grupo es este señor, que se llama Adalberto Santiago. Y yo quiero anunciarlo así, para que me traiga gente, porque si voy a anunciar a la Típica ’73, ¿quién es la Típica ’73?”  Tú sabes, hubo polémicas por eso (10)

 

     La cuestión de la santería, es que alguno que otro estaba en la santería. Pero no es que le estábamos haciendo brujería a nadie. 

 

EEG:   Pero los que se salieron y formaron Los Kimbos fueron los que no eran santeros.

 

AS:     No, al contrario. Estábamos y estamos en la santería.  Pero eso no quiere decir que no sea católico, apostólico y romano, porque eso se deriva del catolicismo. Hay que ir a la iglesia.

 

EEG:    Entonces, eres tanto santero como católico, ¿no?

 

AS:   Así mismo.

 

EEG:   En mi entrevista a John “Dandy” Rodríguez,  él me dijo que él era santero. Si eso es así, ¿por qué no se fue él con ustedes?

 

AS:    Eso no importa. Lo que pasó, pasó, y gracias a Dios que pasó, porque yo mejoré. Los cambios que yo he hecho en mi vida son para mejorar, no son para echar para atrás. No puedo decir que me lamento de lo que he hecho. (RISAS DE ADALBERTO) Tú sabes que uno es de una forma y el otro de otra. Si tú crees en Dios, pues tú tienes tu religión.

 

EEG:    ¿Por qué se salieron ustedes, los santeros?

 

AS:    Porque vimos la inquietud. [Nos dijimos]: “Bueno, como esta gente está en otra onda, y creen que nosotros estamos haciendo esto, pues vamos a demostrarle que no es verdad”. Entonces ellos se fueron y grabaron. Después de eso fue que entró Tito Allen, y cometieron el error de que se fue Tito Allen y entró Azuquita, quien estuvo poco tiempo [con ellos].  Poco duró el momento aquel de felicidad, como dicen.  Después vino José Alberto. Con José Alberto fueron a Cuba a grabar. Y allí fue que todos los bailes cubanos que tocaban, nos lo dieron a nosotros.

 

EEG:   A Los Kimbos.

  

AS:     Yo no los quería, pero, si vinieron, pues yo los cojo, porque el problema es de ellos. Y el problema es del promotor, que dijo: “No, yo no los quiero, porque, ¿qué tienen que ir a hacer en Cuba?” (11)

 

EEG:   Entonces, partieron con mala sangre.

 

AS:   No, no. Al contrario. Mira, hubo un momento en que hubo un problema. Cuando me fui de solista después de Los Kimbos, hubieron momentos en que el cantante que estaba – creo que fue Azuquita, en ese tiempo –, tuvo problemas, y entonces yo vine y reemplacé en muchos bailes que ellos tenían.  Como estaba solito, [me decían]: “Mira, tal fecha.”.  [Yo decía]: “No hay problema. Tengo mis puertas abiertas”. Entonces, después, yo les recomendé a José Alberto: “Mira, yo no puedo seguir, porque ya yo empecé algo de solista, Ya yo vengo caminando de solista. Aquí hay un muchacho que quiero que prueben”.  Lo llevé al lugar a donde yo iba a trabajar, le gustó a la gente, y yo me fui. 

 

EEG:   Así que tú recomendaste a José Alberto.

 

AS:   Sí.  Pero eso no está en la historia.  No está en la biografía, pero fui yo. (RISAS DE ADALBERTO)

 

EEG:   OK. Vamos a hablar de los Kimbos, que tenían su propio sonido. ¿Qué los diferenciaba de la Típica ’73?

 

AS:   Bueno, yo creo que nos quedamos más o menos con el sonido anterior, que era el que gustaba – o sea, de dos trompetas y un trombón.  Nos quedamos con el sonido, porque tocábamos también los números de la Típica.

 

EEG:    ¿Ah, sí? ¿Eso no fue motivo de pelea?

 

AS:    No, tampoco, porque, si vamos a partir, ¡vamos a partir bien! (RISAS DE ADALBERTO).  La identificación de los números de la Típica era yo. El que vino atrás, pues, me vino a cantar a mí. 

EEG:   Y los líderes oficiales de los Kimbos eran...

 

AS:   Orestes [Vilató] y yo.

 

EEG:   Sin embargo, sólo grabaste dos álbumes con Los Kimbos.  Me imagino que el primero fue el palo, debido a “Lágrimas Negras”. ¿Por qué te saliste tan pronto?

 

AS:    Lo que pasa es que yo me propuse una meta.  Me dije: “Bueno, si yo llego a cierta edad, y este grupo no camina como debe caminar, como yo pensé, pues...”.  Hubo muchas trabas a nivel de empresas – no de la compañía de discos –, y el agente más solicitado a nivel de ventas en ese momento era Ralph Mercado. El negocio mío con Ralphy fue verbal, más que contrato. Y, bueno, mientras él me atendía, tenía trabajo. Y entonces nosotros cometimos el error de quedarnos con el mismo booking agent, o sea, la misma agencia – aunque nos manejaba Ray Avilés, que era la misma compañía. O sea, Ray Avilés trabajaba con Ralph Mercado en ese tiempo, de booking agent.  Entonces nos quedamos con él, chévere. El buscaba lo mejor para nosotros, pero tú sabes que donde manda capitán, no manda marinero.  Entonces, pues, lo mejor era para Johnny (Rodríguez) y Sonny (Bravo), porque Johnny y Sonny con Ralph Mercado eran bien panas.  Aunque yo soy pana también. Pero, como te digo, siempre hubo esa traba, tú sabes.  Entonces dije yo: “Bueno, este grupo está chévere”.  Y el grupo – Los Kimbos –, para mí, es uno de los mejores grupos que se hicieron en Nueva York, desde personal, hasta todo.

 

     Entonces Orestes cambió a tocar timbal nada más, porque había un bongosero, Nelson en el tres, y etcétera, etcétera.  El sonido prácticamente era el mismo, y bien chévere. El grupo bien formadito.  Pero yo dije: “Si llego a cierta edad, y no a pasado lo que yo pienso, pues me voy de solista”. Yo me puse una meta, la cual hice, y gracias a Dios, no me ha ido tan mal.

 

EEG:   Te fuiste como solista y en 1977 sacaste el LP “Adalberto”. Básicamente el mismo formato de Sonora de Ray Barretto.

 

AS:   ¡Ajá!  Se habló en la compañía para grabar un LP de ese estilo. Y, si lo va a producir Ray [Barreto], mucho mejor. Se escogieron los números, y, si tú vas a ver, era más o menos el formato que traía Ray, de trompetas – sonorista. Hizo bastante. Lo que pasa es que yo, al hacer otro contrato, dije: “Yo quiero que el LP sea en el sello Fania”. 

 

     Ese LP, que tiene “Tú me desesperas” e “Imposible ha de ser”,  pegó un montón en Centro y Sudamérica.  Todavía cuando trabajo tengo que hacer esos números.  Yo escogí los músicos y Barretto hizo la producción de ese primer LP. Entonces para el segundo, “Popeye”, pues yo los escogí, y la producción la hizo Louie Ramírez. Para “Feliz me siento”, la producción la hizo también Barretto. “Calidad”, con Papo Lucca, lo hicimos allá en Puerto Rico; tremenda producción.

 

EEG: ¿Cómo era Jerry Masucci como productor contigo? ¿Te daba mucha libertad en tus grabaciones?

 

AS:   Bastante. El siempre nos dio bastante libertad. En el primer disco, él puso su granito en un sólo número. Me dijo: “Yo quiero que grabes este número, olvídate del resto”, que fue “Tú me Desesperas”, que ya lo había hecho Justo Betancourt (5). Y da la casualidad que es de Hugo González (6).  Y entonces yo le dije: “Bueno, si tú eres el que vende discos, pues entonces pa’ encima”. El quiso que yo lo hiciera de nuevo.

 

EEG:     ¿Qué me puedes decir de Jerry Masucci?

 

AS:   Tremenda persona.  Bueno, cada cual dice el cuento a su manera. (RISAS DE ADALBERTO).  Ya tú sabes, los que cogen prestado, y después dicen que el otro es malo.  (RISAS DE ADALBERTO y ERIC).  Hay dos clases de personas: los cínicos y los que no son cínicos. (RISAS DE ADALBERTO)

 

EEG:    Háblame un poco de “Cosas del Alma”, el álbum de boleros que hiciste como solista para el sello WS Latino. ¿Lo hiciste mientras eras artista de Fania?

 

AS:   “Cosas de Alma” salió ahora como CD.  Ese LP lo hice estando con Fania. Les pedí permiso, porque me presentaron el proyecto para hacerlo. Me dijeron: “Escoge tus dos números, pero esto es lo que hay”.  O sea, yo escogí todos los números de la década del cincuenta.  Quisimos oír de la década del cincuenta para adelante. Ahora, pues, el LP está resurgiendo de nuevo, porque el bolero es una cosa que no muere.

 

 

EEG:   Vamos a hablar de “Popeye el Marino”, que produjo Louie Ramírez. ¿Cómo surgió ese trabajo?

 

AS:   Bueno, yo fui a Rochester a trabajar de solista, y me acompañó una orquesta de allá. Y da la casualidad que uno de los cantantes compuso el tema “Ay Caray”, que está en ese álbum. Y, entonces, estaban ensayando ese número los muchachos con el cantante.  Y, en el momento preciso que estaban ensayando “Ay Caray”, yo llegué, y me llenó tanto esa letra, que yo le dije al compositor, quien también era el cantante: “¿Si yo me aprendo esa letra, tú me dejas cantar ese arreglo?”  Y me dice: “¡Y [todos] los que quieras!”  Entonces me aprendí la letra y lo canté. Después lo grabé, y le grabé “Popeye”, que también es de él. 

 

EEG:   Pero Popeye fue el que salió en la carátula del álbum. ¿De quién fue esa idea?

 

AS:   Bueno, el concepto fue mío. Fui donde Izzy Sanabria, y le dije: “Mira, Izzy, tengo esta inquietud. Consíguete el magazine (revista), ponme la caricatura mía, y tú dibuja ahí a Popeye. Inventa tú lo que quieras – le pones una pipa con salsa, o...”.  Entonces él hizo el concepto (12)

 

EEG:   ¿Cuál fue el palo de ese disco: “Ay Caray” o “Popeye”?

 

AS:   Los dos, porque da la casualidad que por esos dos discos fue que yo fui a Chile. Yo hice ese número para el año internacional del niño, que fue en los ochentas. En Miami yo fui a un concierto en donde las dos terceras partes o más, eran niños.  Y después fui a Chile, a hacer Don Francisco. Hice dos programas en vivo y dos programas grabados. 

 

EEG:   Entonces “Popeye” fue dirigido a los niños.

 

AS:   Prácticamente, tú sabes, por los muñequitos. 

 

EEG:    ¿Qué recuerdas del concierto de la Fania All Stars en el Yankee Stadium?

 

AS:   Lo que yo recuerdo de ese concierto, es que empezamos con la Típica 73 – abrimos el concierto.  Entonces después de la Típica, yo me quedé para hacer algo con Mongo [Santamaría], un coro que yo hice.  Después me salí, para irme para un baile que nosotros teníamos – creo que era en Brooklyn.  Y, cuando yo veo a todo el mundo corriendo, ¡yo también corrí! (RISAS DE TODOS)

 

EEG:    O sea que ya estabas regresando al estadio para tocar con las Estrellas de Fania.

 

AS:    No, no. Ya yo estaba saliendo del lugar, porque ya había trabajado con Mongo Santamaría. Saliendo del lugar, porque íbamos a ir al baile.  Cuando veo a todo el mundo corriendo... ¡Muchacho!

 

EEG:    Pero, ¿no tenías tú que cantar también con las Estrellas de Fania, esa tan importante noche?

 

AS:    No. Nada más con la Típica.

 

EEG:   No estabas programado con la Fania.

 

AS:   Nada con la Fania. Hice algo con Mongo, y después de allí arranqué para [el otro compromiso].  Había compromisos previos con la Típica.

 

EEG:    En el álbum “Cosas del Alma”, grabaste tu tercera versión de “Alma con Alma”.  ¿Cuál fue la razón de eso?

 

AS:   Ese es un bolero que fue hit, y entonces en ese LP quisimos hacer un concepto de bolero de los años cincuenta. Y ese bolero, pues, fue antes de los cincuenta.

 

EEG:   Conversando con Ismael Quintana, él me dijo que su predilección para cantar era el bolero. Héctor Lavoe también tenía su gusto por el bolero, grabando incluso un álbum en honor a Felipe Pirela.  Cheo hizo lo mismo. ¿Cuál es tu predilección?

 

AS:   Bueno, yo creo que yo puedo hacer las dos cosas.  El bolero es una cosa que hay que saberla interpretar.  Pero me gustan las cosas movidas.

 

EEG:    Sobre el tema romántico, también grabaste un álbum de salsa sensual, llamado “Sex-Symbol”. 

 

AS:   Me dijeron del proyecto ese, y yo dije: “Bueno, ¡vamos pa’ encima!” Y, gracias a Dios, me ayudó, pues en Sudamérica y Europa estuvo pegado.

 

EEG:   ¿Tienes idea de cuál de todos los álbumes en que participaste ha sido el más exitoso?

 

AS:    Bueno, todavía “Quítate la máscara” se vende”.  Y todavía “Mañoñó” de la Típica se vende.  De los míos, el primer álbum se vendió muy bien.  La gente salsera como que recuerda ese álbum más que los demás. Y “Ay Caray” de Popeye.

 

EEG:   Fuiste uno de los preferidos de Louie Ramírez, tanto así que te incluyó en algunos de sus álbumes.

 

AS:   Para mí, Louie fue uno de los mejores arreglistas y músicos de nuestra historia.  Pionero, también. Él le hacía muchos arreglos a Willie Rosario... a casi todas las orquestas en Nueva York. A Tito Rodríguez. ¡Hasta a Puente le hizo arreglos! El tipo era un genio. El problema, ya tú sabes, es de cosas en la que a lo mejor se metió que lo llevaron al final. Pero así es la vida. Uno escoge su camino a veces.

 

EEG:    Otro dato curioso es que fuiste el cantante del último álbum que grabó Roberto Roena para la Fania, en el cual cantó Raulín Rosendo, pero al final usaron tu voz.

 

AS:   Ah, sí, porque hubo problemas con Raúl, con la compañía.  Entonces yo estaba bastante saturado de trabajo; estaba supuesto a grabar y no grababa. Como tenía tanto trabajo, a veces [salían] los proyectos de Fania: “¡Mira, tienes que grabar!” Y decía “Muchacho, ¡no tengo tiempo!” “Mira, aquí hay un producto para que lo hagas”. Y decía: “¡Tráemelo para acá!”  (RISAS DE ADALBERTO)  Y salió, y trabajamos bastante.

 

EEG:   ¿Cómo surgió la idea de hacer un disco con Celia y Barretto?

 

AS:   Bueno, Barretto me llamó: “Mira, vamos a hacer esto”. Y dije: “Bueno, ¡vamos pa’ encima! Sería para mí un honor”. Jerry estuvo de acuerdo, y Barretto dijo: “Bueno, pues, sería con Adalberto”. Y me llamaron.

 

EEG:   Tu nombre no sólo es famoso por ser cantante, sino que también hiciste coro para casi todo el mundo. No puedo pensar en otro, salvo Yayo el Indio. ¿Qué te dio más beneficio económico: los coros o tu trabajo como solista?

 

AS:   Lo que pasa es que uno no puede balancear eso, tú sabes.  Pero se supone que uno como solista gana más, ¿no?  Los coros en ese tiempo no pagaban tanto.  Pero la satisfacción de que lo llamen a uno, y ser parte de ese producto, para mí ha sido bonita.  Tú sabes, que hayan pensado en uno para hacer producciones. Para mí eso fue motivo de satisfacción. 

 

EEG:   También te buscaron para participar con Africando.

 

AS:   Ah, sí, lo de la fonética. (RISAS DE TODOS)

 

EEG:   Háblame de eso.

 

AS:     Bueno, lo que pasa es que ellos tienen su idioma. Entonces fue: “Tú pronúncialo, y yo lo escribo como se te oye a ti”. Y entonces cuando yo lo escribía, y lo practicábamos, decían: “Así es que lo quiero”.

 

EEG:    ¿Quién coordinaba todo ese enredo de idiomas?

 

AS:   Ronnie Baró y un muchacho africano que se casó con una cubana, que era la tía o la hermana de Ronnie. Y decían: “Mira, pues, vamos a escribirlo, para que ustedes los oigan” – o sea, como fonética, ¿no?  Tú le estás oyendo la pronunciación a ellos y tú estás escribiendo esa pronunciación como tú la puedes leer haciendo coros. Y funcionó la idea (13). (RISAS DE ADALBERTO) 

 

EEG:   ¿Vinieron ellos sin hablar una palabra en español?

 

AS:   Bueno, el productor musical hablaba francés y español. 

 

EEG:   Tuvieron problemas de comunicación, pero al final todo salió muy bien.

 

AS: Bueno, problemas de comunicación con el que pagaba, sí. (RISAS DE TODOS)  Pero el que me pagaba a mí era otro. A mí no me pagaban en francés; me pagaban en español. (RISAS DE TODOS)

 

 

Cheo, R. Blades, I. Quintana, A. Santiago y J. Pacheco. Concierto de La Fania.

Foto de Martin Cohen.

 

EEG:   ¿Tienes algún momento en tu carrera que recuerdas en especial?

 

AS:   Hay tantas satisfacciones.  Con la Fania fue una de las satisfacciones grandísimas para mí.  Nosotros metimos 80,000 personas en El Campín, de Bogotá. O sea que no hubo una en específico, porque a todo trabajo uno le pone cariño.

 

EEG:   ¿Dónde sientes que más pegaron Las Estrellas de Fania?

 

AS:    Creo que en Centro y Sudamérica – Colombia, Venezuela, Perú... Esa gente son salseros de verdad, sin decir que nosotros los puertorriqueños no somos salseros. Pero esa gente se sabe bien la historia. Esa gente desayunan, almuerzan, cenan, y de postre, salsa. Tú ves un muchachito de 12 o 14 años, y se sabe quién tocó esto, quién tocaba con fulano... A veces [a los artistas] ni los ponen en los créditos. Aparte de que no leemos la parte de atrás [de los discos].

 

EEG:   Recuerdo que nosotros nos aprendíamos hasta los nombres de los ingenieros de sonido.

 

AS:    Eso mismo... Que sin Jon Fausty, que si [Irving] Greenbaum...

 

EEG:    Me parece que el sonido durante la primera mitad los setentas, cuando Fausty era el que le daba identidad a muchas orquestas, era bueno, pero como que fue bajando de calidad después. 

 

AS:    Lo que pasa es que el sonido no tiene que ver con el ingeniero; el sonido es el estudio, y el sonido es el que le da la matriz.  Para mí, las grabaciones que me ha hecho Green (Greenbaum) me han gustado. El hizo “Tremendo Trío”, él hizo”Rican / Struction”... él hizo un montón.  Después de cuatro años, Barretto vino, e hicimos “Rican/ Struction”. Ese es el que tiene (PROCEDE A CANTAR): “Al ver sus campos lloró, un jibarito herido”.

 

EEG:   Fuiste partícipe de los años gloriosos del boom salsero, y pudiste ser testigo de cómo se fue apagando. ¿Cuál piensas fue la razón de esta caída?

 

AS:   Bueno, yo creo que hubo un momento donde Jerry [Masucci] se cansó o le ofrecieron dinero. El dinero que hizo Jerry no creas que fue de discos nada más, porque el tipo era negociante; compraba propiedades – que si compraba aquí, que si compraba allá. El tenía una visión de lo que podía sacar.  Entonces él vendió Fania por siete años a un señor en Venezuela, que era extranjero. Lo que pasa es que ese hombre dejó de grabar, o sea, se dedicó más al catálogo, que a grabar a los artistas. Entonces, ¿qué pasa?, parece que lo vendió y le tenían que pagar cierta cantidad – esas son negocios que hacen la gente En cierto momento tenían que darle un billete, no apareció, y le quitó el sello para atrás.  Pero se dedicaron al catalogo, porque Fania vende todavía. Pero una cosa buena fue que nos internacionalizó a nosotros. Lo que a mí concierne, ya yo estoy viviendo de la trayectoria. 

 

EEG:   Pero no ganan regalías.

 

AS:    No, en lo latino, a nadie le dan.

 

EEG:   ¿Cuál es tu opinión del ambiente salsero en los tiempos actuales?

 

AS:    Bueno, yo tengo mi criterio. Aquél puede decir que no sirve, el otro puede decir que es monga... Mi criterio es que a mí me ha ayudado, porque actualmente yo no he grabado lo que es salsa gorda prácticamente desde 1990.  Entonces grabé “Sex Symbol” (1989), y grabé “Hay algo en ella” (1991). O sea, grabé salsa monga, como le dicen, salsa erótica, salsa de cama... Pero a mí me ha ayudado en ciertos aspectos, porque aún los muchachos de hoy día, como la música esa no les ha llegado, como les llegó en un tiempo la música gorda o la de la Fania, pues los muchachitos hoy día están buscando ¿de dónde vino eso?  Entonces ahora estamos creando conciencia, ¿no?, donde tú ves la convención esta de la salsa aquí, allá, en Europa, en todos lados. ¿Qué es lo que se toca?  No se toca salsa monga. Se está bailando la salsa dura. Las Estrellas de Fania fuimos recientemente a Puerto Rico, y fue un lleno total.  Madison Square Garden, lleno total.  En el ’94 hicimos un LP en vivo en Puerto Rico con la Fania, y dos terceras partes eran muchachitos de dieciocho o veinte años para arriba. 

 

     Lo de ahora yo no encuentro que sea malo. Nos ha ayudado. Me ha ayudado a mí, porque yo estoy viviendo de las dos cosas – de la salsa monga y de lo otro. Yo fui a Venezuela en el ’98 con Barretto, e imagínate que lo que estaba pegado eran tres números de un LP que yo había grabado en el ’89. ¡Imagínate tú!

 

EEG: Aunque la música que más escucho es la grabada en los setentas, creo que lo grabado en los años anteriores – los años del Palladium, por ejemplo – era de mejor calidad, comparado con lo que hizo Fania.

 

AS:   Nadie puede decir si fue mejor o fue peor.  Yo sé que cuando se trabajaba en ese tiempo, las bandas eran más organizadas.  En ese tiempo yo estaba empezando. Yo llegué a tocar en el Palladium con Chuíto, pero fue más folclore. Entonces, pues, las bandas ensayaban y eran arreglos tremendos, organizados.  Lo de ahora es computarizado. 

 

EEG:   ¿Y los setentas?

 

AS:   Aquello, ya tú sabes, se inventaba allí mismo.  En el Palladium la banda ensayaba, organizada, con sus cantantes, sus arreglos eran bien chévere. ¡Casi lo mismo que con la computadora!  Pero el cantante tenía que cantar. (RISAS DE ADALBERTO)  Y cuando se grababa, se grababa en vivo. 

 

EEG:   Durante los años de la Fania también grababan en vivo, ¿no?

 

AS:   Prácticamente.  Sí

 

EEG:   ¿Qué te gustaría hacer que no has hecho todavía?

 

AS:   A mí me gusta hacer lo que hago. Me la he pasado viajando. Viviendo de la trayectoria, como te digo. Pero quisiera hacer otro LP de salsa gorda. (RISAS DE ADALBERTO)  Quisiera hacer algo que quede para la historia.  Estamos bregando en eso. Todas esas cosas están en proyecto, y no se han concretado, pero, con el favor de Dios, eso es lo que me gustaría. 

 

EEG:    ¿Algunas palabras finales?

 

AS:   Bueno, que los quiero mucho. (RISAS DE TODOS) Y gracias por la entrevista.

 

 

Gracias a ti, Adalberto. Y no te preocupes, hermano, pues ya quedaste en la historia.

 

Adalberto Santiago, Eddy Martínez y Louis Bauzo. Foto de Martín Cohen

 

 

NOTAS:  

 

 

1.      Dos de las grabaciones que Adalberto Santiago hizo como uno de los vocalistas de la orquesta de Chuito Vélez están disponibles en CD. Ambas salieron originalmente bajo el sello La Flor Records.  Las versiones de CD están bajo el sello Mary Lou Records. 

 

 

a.       Chuito Vélez y sus Estrellas Boricuas (CD –123).   El CD indica que este fue el primer LP de este grupo, pero eso necesita verificación.  Las notas mencionan que en ese tiempo – 1958 – el grupo estaba tocando en el Teatro Jefferson y el Teatro Puerto Rico; y los clubes Pan American, El Caborrojeño, el Monte Carlo y otros, subrayando un contrato de exclusividad con el último.  Debo destacar, sin embargo, que a veces se me hizo difícil distinguir la voz de Santiago en esta producción.  Los cantantes en esta producción fueron Adalberto Santiago (descrito como guarachero), Ever Padilla (descrito como solista) y el propio Vélez.  Los otros músicos que se mencionan son “Mollejita” (saxofón), Miguel Vidal (arreglista y segunda trompeta), y Rafael Labasta (primera trompeta). El dominicano Labasta años más tarde fue a residir a Panamá y tuvo una de las mejores orquestas de salsa de los setentas.

 

b.      Chuito Vélez y su Super Orquesta  “Si Pancha Plancha” (CD – 132).  En las notas se destaca que Vélez nació en el pueblo de Comerio, Puerto Rico.  Desafortunadamente, en el CD no se mencionan los otros músicos participantes. La carátula promueve el tema “Sombras”.  En esta producción sí se puede escuchar la voz de Adalberto Santiago claramente en varios números. 

 

2.  Una entrevista con el director de orquesta y trompetista Willie Rodríguez (José William Rodríguez de Jesús Escalante (1935 -     ) – posiblemente la única disponible en la internet – se encuentra si van al siguiente portal:

http://www.passiondiscs.co.uk/articles/willie_rodriguez.htm

En esa entrevista se incluye la discografía de Rodríguez y se discute parcialmente la participación de Richie Ray y sus músicos en las grabaciones de Willie Rodríguez.  La información del álbum en el cual participó Adalberto Santiago es: Mr. Willie Rodriguez Orchestra with Leo Casino 'Heat Wave' (Fonseca Records LP-1117) 

 

 

3. El álbum de Willie Rosario en el cual Adalberto Santiago participó fue “Boogaloo y Guaguancó”, grabado en 1968 para el sello Atco, subsidiario de Atlantic Records. 

 

4.     Durante los carnavales en Panamá, muchas de la orquestas que venían de Nueva York tocaban gratuitamente en la calle, especialmente la Avenida Central, durante el día.  Durante la noche, las orquestas tocaban en toldos, que consistían en lugares de construcción básica y barata, con el único objetivo de ser usados para bailes. El Club de Yates y Pesca no era o es un toldo, pero muchas orquestas también hicieron lo suyo en ese lugar.

 

5.     El tema “Tú me desesperas”, cantado por Justo Betancourt, salió en el álbum “El que sabe sabe” (Fania 389). 

 

6.     Hugo González fue el compositor de los éxitos  “Quítate la Máscara”, “Mírame de Frente”, “Arrepiéntete”, “Adivíname y Olvídate”, entre otros.

 

7.     Algunos de los nombres mencionados por Adalberto en esta respuesta, no se encuentran en los créditos de los álbumes grabados en el Red Garter.  Al momento de escribir esta entrevista, no he podido verificar si Larry Spencer y Roberto Rodríguez participaron en ese concierto.

 

8.     El concierto en el Beacon Theatre, en la ciudad de Nueva York, fue grabado en mayo 28, 1976, y salió en el álbum “Barretto Live – Tomorrow”, para el sello Atlantic (Atlantic SD 2-509, 1976).  El CD salió bajo el sello Koch Records, con licencia de Atlantic. 

 

9.     Los miembros de la orquesta de Ray Barretto que desertaron y se unieron o formaron la Típica ’73 fueron el percusionista John “Dandy” Rodríguez, René López (trompeta), Dave Pérez (bajo), Orestes Vilató (timbales) y el cantante Adalberto Santiago. 

 

10.     Los miembros de la Típica ’73 que se salieron para formar la orquesta Los Kimbos fueron Adalberto Santiago, Orestes Vilató, Nelson González y Joe Manozzi.

 

11.            No es secreto que el viaje que hizo la Típica “73 a Cuba les fue perjudicial en cuanto a contrataciones en los Estados Unidos. De acuerdo a John “Dandy” Rodríguez (en entrevista a este autor), Omega Seven (Omega Siete), un grupo anti-castrista de Nueva Jersey, fue responsable de dirigir ataques publicitarios contra la Típica ’73.

 

11.     Izzy Sanabria fue y es, junto a Paquito Navarro, Symphony Sid, Aníbal Vázquez y otros, Maestro de Ceremonia de las Estrellas de Fania. También fue y es diseñador gráfico de posters y cubiertas de muchos álbumes de ese sello. Pueden apreciar su histórico trabajo en el portal:  http://www.salsamagazine.com/

 

 

13.      Adalberto Santiago ha participado como cantante o corista en casi todas las grabaciones de Africando, incluyendo “Volume 1: Trovador” (1993), “Volume 2: Tierra Tradicional” (1994), “Gombo Salsa” (1996), “Mandali” (2000), y “Martina” (2003)

 

Derechos Reservados de Autor

Herencia Latina

Edición noviembre de 2004